No hace tanto tiempo que Microsoft dominaba completamente la Web gracias a su navegador Internet Explorer, el más usado con mucha diferencia; y sufrimos por ello. Alternativas como Firefox se acercaron, pero nunca llegaron a quitarle la corona.
La llegada de Google Chrome revolucionó el sector, y desde entonces la Web es diferente. Todos los navegadores han adoptado estándares abiertos y las experiencias que podemos disfrutar son más completas y funcionan mejor.
Y precisamente ahora un navegador de Microsoft puede ser el que mejor colocado esté para aprovechar la situación; claro, que ya no es Internet Explorer, sino Edge. Y la Microsoft de entonces no es la de ahora.
El nuevo Edge supera a Firefox
La Microsoft actual ha abrazado los movimientos para mejorar la Web como si fueran suyos, incluso tragándose el orgullo con un navegador basado en la tecnología de Google: el nuevo Edge, que fue lanzado a principios de año y desde entonces se ha convertido en el favorito de mucha gente.
¿Cuánta gente? Pues según el último informe de NetMarketShare, la suficiente como para superar a Firefox. En efecto, tenemos nuevo "líder del resto", con Edge alcanzando el 7,59% de cuota de mercado; de esta manera, supera a Firefox, cuyo último año fue especialmente malo cayendo hasta el 7,19% desde un 9,27%.
De hecho, podríamos decir que el cambio es más culpa de la caída de Firefox que del crecimiento de Edge, pero es innegable que esto último también es cierto. De un año a otro, Edge creció más de 2 puntos porcentuales.
El plan de Microsoft funcionó
Por supuesto, hay que poner algo de contexto a estas cifras. Para empezar, es imposible saber cuál es el uso real de navegadores; NetMarketShare sólo sirve para hacernos una idea, y es una referencia como cualquier otra.
Además, hay que recordar que Firefox, Edge y el resto de navegadores se están peleando por las "sobras". Google Chrome sigue siendo el líder absoluto, con un 68,50% de cuota; está en una posición no muy diferente de como estaba Internet Explorer hace años.
De hecho, podríamos decir que su dominio es incluso mayor que el de Internet Explorer, ya que hay más navegadores basados en su misma tecnología; Chrome está basado en el código de Chromium, de código abierto y por lo tanto otros proyectos también lo pueden usar.
Eso es lo que hizo Microsoft con el nuevo Edge, convirtiéndolo de repente en una gran alternativa a tener en cuenta. El nuevo Edge tiene todo lo bueno de Chrome (como sus extensiones y compatibilidad con webapps), sin algunas de sus desventajas y muchas ventajas, como un mejor rendimiento en Windows 10 y más protección.
De hecho, lo llamativo es que Microsoft ha conseguido adelantar a Firefox sin usar aún su gran baza: que su navegador viene preinstalado en Windows. Sin embargo, el nuevo Edge no vendrá por defecto hasta la próxima actualización del sistema. Por lo tanto, el crecimiento puede venir puramente de gente que se ha descargado el programa porque ha querido. Malas noticias para Firefox, sin duda.