Si queremos un buen ejemplo de cómo el sector tecnológico puede cambiar en apenas un año, no tenemos más que fijarnos en Microsoft. El gigante presentó a finales de 2019 un ambicioso plan para volver a ser relevante en un mundo cada vez más dominado por Google y Apple.
Microsoft apostaría todo por nuevos tipos de dispositivos, adelantándose al resto adoptando la doble pantalla tanto en smartphones como en tablets y portátiles. Y la base de ese plan estaba en Windows 10X, un nuevo sistema más ligero y con una nueva interfaz.
Y entonces llegó 2020. No hace falta recordar uno de los peores años de la historia reciente, pero baste decir que de repente, los ordenadores ganaron mucho protagonismo, por el repentino crecimiento del teletrabajo.
Windows 10X, abandonado
Microsoft tuvo que reaccionar ante la subida de un mercado para el que sólo tenía previsto pequeñas actualizaciones de Windows 10. Poco a poco, los proyectos anunciados en 2019 han ido perdiendo prioridad. El smartphone Surface Duo es el único producto que ha visto la luz, pero su lanzamiento ha sido limitado y no ha llegado a España. La tablet de dos pantallas Surface Neo no ha tenido la misma suerte, y a estas alturas ya es poco probable que sea lanzada.
Sólo nos queda Windows 10X, que Microsoft primero intentó salvar cambiando su objetivo. Hace un año, cambió de ser un sistema exclusivo para dispositivos de dos pantallas, a una nueva versión de Windows 10 también disponible para ordenadores convencionales. La idea era hacer la competencia a Google con sus Chromebooks, con un sistema más ligero para equipos baratos para estudiantes y empresas.
Ahora, Windows 10X podría haber encontrado su final prematuro. El experto en Microsoft Brad Sams afirma que Microsoft ha abandonado, posiblemente para siempre, el nuevo sistema.
Centrado en Windows 10
Los motivos son evidentes. En un mercado que demanda más portátiles y ordenadores con Windows 10, la prioridad para Microsoft es mejorar el sistema principal, no presentar otro más.
La buena noticia es que las mejoras y novedades de Windows 10X llegarán a la versión principal de Windows 10, en forma de actualizaciones. Microsoft ya avisó a principios de año de que "Windows ha vuelto", y para la segunda mitad del año se espera una gran actualización que traerá cambios estéticos en la interfaz, incluyendo nuevos iconos. Muchos de estos cambios están inspirados en el estilo presentado con Windows 10X.
Además, esto no significa que Windows 10X vaya a desaparecer para siempre; no saldrá en el 2021, pero si la situación cambia, Microsoft podría recuperarlo y hacer realidad su visión de las dos pantallas. Pero ahora mismo, eso es poco probable y tiene que dedicar recursos a mejorar Windows 10 en sistemas ARM para hacer frente a Apple y su procesador M1.