Puede que WhatsApp sea la app de mensajería más usada en España, pero ese puesto está más amenazado que nunca por alternativas como Signal o Telegram.
Esta caída en gracia se puede explicar por muchas razones, pero especialmente, por la polémica de las nuevas condiciones de WhatsApp; aunque ya no son obligatorias, sin aceptarlas no podremos usar WhatsApp como siempre a partir del día de hoy.
Estas condiciones llamaron la atención por incluir referencias a Facebook, debido a una nueva función para contactar con empresas que ofrecen servicios a través de la red social. Eso recordó a mucha gente que WhatsApp pertenece a Facebook, y despertó miedos sobre su privacidad.
Telegram contra WhatsApp
Aunque WhatsApp ha iniciado una gran campaña publicitaria, recordando que no es capaz de leer los mensajes, apps como Telegram se han aprovechado de la polémica para ganar millones de usuarios en muy poco tiempo. Tal vez por eso, las cuentas en redes sociales de Telegram han acelerado los ataques contra WhatsApp, usando memes; aunque el último ha escalado las tensiones.
En el mensaje de Twitter, Telegram publicó una imagen que da a entender que es el momento de enviar a WhatsApp y a Facebook a la basura; el tuit ha ganado más de 5.600 retuits en un día, lo suficiente para que el Community Manager de WhatsApp haya respondido con un 'zasca'.
En el mensaje de WhatsApp, se hace referencia a que los chats de Telegram no están cifrados de extremo a extremo por defecto. Esta es una de las grandes debilidades de Telegram: para cifrar nuestras conversaciones de la manera más segura, es necesario iniciar un "chat secreto", pero esa es una opción que no aparece a simple vista, y está 'oculta' en el menú cuando seleccionamos un usuario para iniciar un chat.
Si simplemente pulsamos en el usuario, el chat no será secreto. El propio fundador de Teletram, Pavel Durov, justificó esta decisión en el 2017: de esta manera, es posible acceder al historial de chats desde varios dispositivos, y prometió que no iba a dar los datos a terceros.
En cambio, WhatsApp cifra todas las conversaciones de extremo a extremo. De esta manera, sólo los participantes son capaces de leer el contenido, y la propia WhatsApp no tiene las claves necesarias para hacerlo.
La respuesta de Telegram ha dejado algo que desear, usando bulos que ya han sido desmentidos. Para empezar, sobre el cifrado extremo a extremo, Telegram afirma que "los usuarios saben cómo funcionan las cosas", dejando entrever que todo el mundo sabe cómo iniciar un chat secreto.
Bulos en marketing
Pero más preocupante es la captura de pantalla que Teletgram ha compatido, en la que se afirma, sin prueba alguna, que Apple, Google y WhatsApp pueden leer los chats de los usuarios.
La lógica es que, si usamos iCloud o Google Drive para almacenar copias de nuestros chats, eso significa que los pueden leer. Eso es falso, porque los chats están encriptados y sólo los usuarios pueden leerlos; Apple y Google necesitarían de las claves para descifrar los archivos con extensión crypt12 generados en la copia de seguridad.
Además, WhatsApp está trabajando en una capa de seguridad adicional: copias de seguridad en la nube con una contraseña, para que impedir que sea posible acceder a los mencionados archivos encriptados. Eso ya es mucho más de lo que Telegram permite; de hecho, es extraño que Telegram haya elegido criticar precisamente una parte en la que no está a la altura.
WhatsApp nos puede gustar más o menos, y es innegable que ha cometido muchos errores en los últimos meses en su afán de unirse con Facebook. Pero usar bulos y acusaciones sin pruebas no ayuda a nadie, y mucho menos a los usuarios. Mejor que Telegram siga con los memes.