Granja de cerdo
Enseñan a una IA a reconocer los sentimientos de los animales: desde tus mascotas en casa a cerdos en granjas
Investigadores de todo el mundo trabajan para crear sistemas inteligentes capaces de interpretar la empresiones faciles de animales.
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La convivencia y el cariño crea un fuerte vínculo entre humamos y animales, hasta el punto de que los primeros puedan detectar ciertas emociones en sus mascotas. Sin embargo, siempre queda algo de incomunicación entre ambas especies que la tecnología puede solucionar. Diferentes proyectos de investigación están desarrollando sistemas de inteligencia artificial para detectar las emociones de los animales domésticos o en granjas.
Intellipig es un buen ejemplo de este esfuerzo global, un sistema que están desarrollando científicos de la Universidad del Oeste de Inglaterra en Bristol (UWE) y el Colegio Rural de Escocia (SRUC) para abordar el bienestar animal. El sistema se está poniendo a prueba en granjas de Reino Unido.
Los cerdos se acercan a los comederos cada mañana. El granero equipado con cámaras y sensores, utiliza esta nueva IA para analizar el rostro de cada animal y reconocerles. Así puede proporcionar una alimentación personalizada y buscar signos de enfermedades o, incluso, estrés o dolor.
Omicrono
Los investigadores aseguran que este sistema no solo supera a los humanos en el reconocimiento de cerdos individuales, con una tasa de precisión del 97%, también ha demostrado ser notablemente hábil para detectar el estrés solo a través de los rasgos faciales, según han indicado en un artículo en la revista Science.
Desde ovejas y cerdos, hasta caballos y gatos están en el objetivo de esta comunidad científica que en diferentes países trata de comprender mejor a los animales para procurar su bienestar y felicidad en cualquier circunstancia. Hace siglos que los científicos descubrieron que los animales, en especial los mamíferos, transmiten sus sentimientos mediante expresiones del rostro y movimientos corporales. Sin embargo, determinar las expresiones en cada especie, las cuales pueden diferir de las conocidas en los humanos, es un gran reto para estos investigadores.
Sistema de IA analizando expresiones faciales de perros Omicrono
En momentos puntuales donde es evidente que el animal sufre dolor o estrés, por ejemplo, cuando se le separa de sus seres queridos o está herido, es posible analizar su expresión para recabar datos. Por ejemplo, el artículo explica que los caballos indican estrés con movimientos y arrugas de orejas similares, pero con diferencias sutiles como mostrar la lengua.
Las herramientas de reconocimiento de 'emociones' entre humanos basadas en IA han sido objeto de escrutinio por parte de los expertos desde hace años. Pero las expresiones faciales son tremendamente subjetivas, incluso las establecidas como universales y pueden cambiar enormemente entre diferentes culturas y poblaciones. De ahí la dificultad a la hora de aplicar esta tecnología con seguridad.
"Espero que haya espacio para los expertos, para asegurarse de que la IA realmente está haciendo lo que dice que hace" dice a Science la científica del comportamiento animal en SRUC, Emma Baxter, que colabora con los investigadores de Intellipig. Sin embargo, este trabajo de catalogación que comenzó siendo manual por parte de los científicos, ahora es labor de la IA. La tecnología debe aprender de los humanos a reconocer esos gestos de dolor, estrés o calma.
En algunos grupos de trabajo, los científicos simplemente están dando a su IA imágenes de animales en diferentes situaciones y dejándoles detectar señales reveladoras por sí mismos, a través de un proceso llamado aprendizaje profundo, como en la en la Universidad de São Paulo. Los responsables dieron al sistema fotos de las caras de los caballos antes y después de una cirugía, así como antes y después de los analgésicos planificados regularmente, instruyendo a la máquina para que se centrara específicamente en las diferencias en las orejas, los ojos y la boca. Después de entrenarse con 3000 imágenes, "la IA aprendió por sí sola", dicen.
Otro proyecto similar en Israel que ha estudiado mediante expresiones el nivel de sufrimiento de los animales con las explosiones de la guerra, asegura estar a punto de lanzar una aplicación basada en IA que permitirá a los dueños de gatos escanear las caras de sus mascotas durante 30 segundos y obtener mensajes fáciles de leer como "Tensión considerable alrededor de la boca detectada; nivel de dolor moderado".
