La industria y el desarrollo militar son un elemento bastante normal y común en muchos países pero sin duda donde más abunda y donde mas se invierte es en Estados Unidos. Muchas compañías y contratistas se dedican exclusivamente a desarrollar tecnología con aplicaciones y usos militares y en muchas ocasiones resulta curioso ver qué hacen, puesto que en la mayoría de casos también hay un posible uso “civil”.

Aquí hemos visto algunos casos de tecnologías militares bastante interesantes, sobretodo en el campo de los aviones no tripulados, pero también en el reconocimiento de gestos y otras cosas. Y la tecnología móvil no podía ser una excepción en este sentido. Porque la comunicación es esencial tanto en la vida civil como en el ámbito militar. Y las plataformas existentes se pueden adaptar.

Es el caso de Android, con el que ya vimos un poco por dónde iban los tiros cuando hablamos de que el Pentágono iba a adoptar Android para la comunicación de su personal dejando de lado Blackberry y Apple, más cerrados. Y es que el sistema de Google es el que encuentran más atractivo por su código abierto, que pueden adaptar y modificar a sus necesidades. Es el candidato ideal para armadas, agencias gubernamentales y demás cuerpos. Tan sólo le hace falta una capa de seguridad “extra” y un hardware que le acompañe en esa dureza y adaptabilidad.

Y no debe de andar muy lejos un diseño con estas características tan exigentes que comporta el adaptar un sistema a nivel militar o de agencias de seguridad. Se ha conocido a través de la revista National Defense que Boeing estaría desarrollando un prototipo de terminal de estas características para la industria militar y aeroespacial. Pero no es el primer desarrollo de este nivel, puesto que ya la empresa Elektrobit ha diseñado un primer terminal con capacidad de recoger datos biométricos. Un prototipo que cumpliría con los requisitos tan altos que la seguridad impone.

Según Jani Lyrintzis, vicepresidente de Elektrobit, el 80% del trabajo a realizar para construir un smartphone militar ya lo llevaría implementado Android en su código fuente. Elektrobit sólo ha tenido que crear una capa intermedia de seguridad para poder proteger la información y cumplir con las políticas de los gobiernos. Luego ya dependiendo del uso y las necesidades es la capa de hardware la que se lleva otra buena modificación. Desde terminales más resistentes hasta dispositivos añadidos como escaners biométricos.

Lyrintzis explica que es mucho más ventajoso partir de esta base de Android que de cualquier otra plataforma para el desarrollo del sistema y las aplicaciones para el mismo. Lo típico hasta ahora era crear las aplicaciones de cero, estudiando el hardware y el software. Un gasto de tiempo y esfuerzo que ahora con un sistema opensource ven agilizado y aligerado. De esta manera los contratistas se convierten en desarrolladores Android trabajando en una plataforma multiproposito. Es decir, que se aprovecha el potencial que la plataforma ofrece para desarrollar software y funcionalidades específicas y en un mismo aparato se pueden englobar múltiples funciones. Ya sea hablar por teléfono o controlar un drone no tripulado.

elektrobit android

Es curiosa la tendencia cambiante, antes la tecnología militar era la que acababa en manos del consumidor, y ahora es justo al contrario. La tecnología de consumo es la que ahora mismo manda, y según Lyrintzis desde hace unos seis años se ha puesto de manifiesto. Quien sabe, a lo mejor el día de mañana podría emerger un Market especializado en aplicaciones militares, o aplicaciones de a pie que se convierten en aplicaciones militares.

Via Gigaom