Desde que el vehículo espacial Curiosity aterrizó en Marte ha sido uno de los temas de conversación del momento, y se ha hablado de todo sobre su llegada al planeta rojo. Una de las cosas que más ha llamado la atención es la mala calidad de las imágenes que ha enviado de vuelta a la Tierra, y es que no sólo son de baja resolución, sino que se ven borrosas y con muy poca nitidez. Tranquilos, dentro de poco llegarán imágenes perfectas, de alta resolución y que nos mostrarán Marte en todo su esplendor.

Thumbnails

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Esta es la primera clave para entender la mala calidad de las imágenes que nos llegan de Marte. Thumbnail es el término que se emplea en inglés para referirse a las

Estos thumbnails tienen una resolución de sólo 64×64 pixels y esa es la razón de la baja resolución de estas imágenes. Después de estas llegaron las imágenes con mejor resolución, pero sin ser nada del otro mundo, la razón a continuación.

Cámaras de peligro

Las denominadas Hazcams son unas cámaras situadas en la parte frontal del Curiosity con el único objetivo de localizar peligros e informar tanto al vehículo como a su conductor de una forma rápida y fiable de posibles obstáculos con los que se encuentre el rover. No están pensadas para captar imágenes de alta calidad, sino para informar rápida y fiablemente, y son las cámaras que primero enviaron imágenes.

Se trata de cámaras en blanco y negro, de 1 Megapixel de resolución y con lentes ojo de pez, por lo que la calidad que podemos esperar de ellas no puede ser extraordinaria. Sin embargo son perfectas para cumplir su trabajo y enviarnos rápidamente una primera imagen de Marte desde el Curiosity.

Protectores de polvo

Pero es que aún hay más, y de hecho posiblemente sea lo más importante. Si os fijáis en la primera imagen a color que nos llegó desde el Curiosity, el enfoque es malísimo, y la nitidez horrible. Hay una explicación muy sencilla para esto, y es que todas las cámaras del rover llegaron a Marte cubiertas por un protector de polvo que protegía sus lentes de choques contra partículas del terreno en el aterrizaje.

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Los ingenieros de la NASA diseñaron estos protectores para que fuesen transparentes, y que en el caso de que fallasen al ser retirados, el Curiosity pudiese seguir tomando imágenes de Marte, aunque fuese en malas condiciones. Los protectores todavía no han sido retirados y no lo serán hasta que la NASA considere que es totalmente seguro. A pesar de su transparencia, las imágenes son muy borrosas, y hasta que no se retiren no veremos todo de lo que es capaz el Curiosity en cuanto a captación de imágenes.

Así que es cuestión de esperar un poco, muy pronto empezaremos a recibir auténticas maravillas de fotografías en alta resolución y a todo color de la superficie mariana desde el Curiosity, que cuenta con posibilidad de captar imágenes en 3D, panorámicas, fotografías con zoom e incluso vídeos a 10 fps. Lo que queda por llegar va a ser impresionante.

vía | Gizmodo