Calorías de las bebidas alcohólicas: ¿Cuantas aporta una cerveza?¿Y un whisky?

Muchas veces, a la hora de empezar a mejorar nuestros hábitos alimentarios pasamos por alto la parte de alimentos que se beben.

Aunque no es mi intención, ni mucho menos, amargar la existencia a nadie, sí que debo deciros que no podemos tratar de cuidar nuestra alimentación entre semana para una vez llegue el viernes empezar a beber líquidos cuál esponja. Porque como ya sabéis, los refrescos azucarados aportan bastante energía inútil, (lo que llamamos calorías vacías porque no aportan ningún otro nutriente) pero el alcohol también trae lo suyo. Por ello, para darnos cuenta, hoy vamos a ver el contenido calórico de diferentes bebidas alcohólicas.

Si bien  no me gusta recomendar contar calorías (un esfuerzo, a mi parecer, realmente  inútil) y aunque hace un tiempo os enseñara a calcular las calorías de un cubata, lo que pretendo conseguir acercándoos esta información es tocar un poco vuestra fibra sensible. Es decir, que podáis daros cuenta que la energía que pueden aportarnos unas copas no es tan trivial como parece.

Las calorías de bebidas alcohólicas, a examen

Aunque obviamente, no todas las bebidas alcohólicas nos aportan la misma energía. No es lo mismo un vaso de cerveza que un vaso de vino y mucho menos que un vaso de güisqui (que mal queda escrito así ¿verdad?,  pero no he podido resistirme a utilizarlo desde que hace poco lo viera utilizado en un medio de información y me enterará de que la RAE es quién a propuesto que se escriba así). Veamos diferentes ejemplos:

Nota: La mayoría de datos han sido extraídos de la base de datos de las Tablas de Composición de Alimentos del programa Dial. No obstante los valores de algunas bebidas no, por lo que podrían no ser aproximados.

¿Pero por qué las calorías de bebidas alcohólicas no son iguales? Pues la respuesta en simple, porque tampoco todas tienen la misma graduación de alcohol, ni la misma cantidad de azúcar añadido como el caso de licores dulces como el anís. Esa adición de azúcares explica porque bebidas como los licores dulces (licor de melocotón, de manzana, anís…)  teniendo una graduación bastante menor que otras bebidas fermentadas como el vozka o la ginebra, poseen las mismas calorías o incluso más. En el caso de bebidas cremosas como el Baileys, además de poseer una importante cantidad de azúcar, también contiene bastantes grasas procedentes de productos lácteos utilizados. Esto hace que una simple copa de Baileys nos aporte prácticamente 300 kcal.

¿Sorprendido del valor energético de estas bebidas?  Pues no es para menos. Y es que un par de copas pueden aportar perfectamente más energía que una comida o una cena. Es importante, pues, que si queremos mejorar nuestra alimentación también tengamos en cuenta las calorías que bebemos. No se trata de ser abstemio, pero tampoco de beber sistemáticamente todos los viernes y sábados.

Imagen| periodistadigital