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¿Por qué no recordamos los primeros años de vida?

31 mayo, 2013 17:15

Según investigadores canadienses el motivo por el que no podemos recordar experiencias vividas en la infancia se debe al crecimiento neuronal que se produce los primeros años de vida.

Por lo visto la produccion de neuronas nuevas que tiene como función aumentar las posibilidades de aprendizaje durante el crecimiento en los primeros años de vida también conlleva una afectación negativa de la memoria.

La neurogénesis:

Se entiende por neurogénesis del desarrollo el proceso de creación de nuevas células (neuronas o celulas gliales) en el sistema nervioso central (cerebro), concretamente en el hipocampo (región conocida por su asociacion con la memoria y el aprendizaje). Se producen dos picos de neurogénesis antes y después del parto, que son seguidos por un decremento en la producción neuronal durante la infancia y la edad adulta.

“Inmediatamente después de nacer, se produce un incremento espectacular del número de conexiones o sinapsis en todo el cerebro humano. Al cumplir el primer año de vida, el cerebro de un niño tiene casi el doble de conexiones si se lo compara con el de un adulto (Huttenlocher y de Courten, 1987; Huttenlocher y Dabholkar, 1997). Muchos caminos efímeros se forman en todo el cerebro del neonato, creando ciertas conexiones entre las distintas áreas cerebrales que ya no se observan en el adulto (Innocenti y Price, 2005). Esta sobreabundancia de conexiones y caminos gradualmente decrece a lo largo de la infancia, a medida que muchos de ellos son “podados” y desaparecen. Muchos factores contribuyen a esta disminución, como por ejemplo la influencia de las experiencias. La actividad de un camino neural, determinada por la experiencia, decide si una conexión particular habrá de debilitarse o se estabilizará como parte de una red permanente. Éste es un factor clave para la “plasticidad” del cerebro en desarrollo: su adaptabilidad respecto a la experiencia, que le confiere un valor inestimable para la supervivencia”.

El cerebro en desarrollo. John O. Ates, Annette Karmiloff-Smith, Mark H. Johnson. Serie: la infancia en perspectiva. The open university. Documento PDF.

El estudio canadiense:

Estudios anteriores habían demostrado ya que aunque las memorias infantiles pueden persistir a corto plazo, se pierden a largo plazo y no las recordamos de adultos, los investigadores de este estudio quisieron averiguar porqué esto sucedía.

El estudio llevado a cabo en canadá fue realizado con un ratón adulto y uno joven. Modificaron los procesos neuronales normales. En el adulto se observó que el aumento en la neurogénesis tras la formación de memorias era suficiente para producir olvido. Y en el joven, se observó que la disminución de la neurogénesis tras la formación de memorias implicaba que el olvido normal producido en edades tempranas no ocurría.

La investigación mostró una relación directa entre reducción del crecimiento neuronal y aumento de la memoria. También se demostró lo contrario, un aumento del crecimiento neuronal implicaba fallos en la recuperacion mnésica, es decir problemas de recuerdo.

Los investigadores afirman que esto explica la amnesia a largo plazo que se da en las memorias de la infancia.

El proceso de formación neuronal compromete la permanenecia de los recuerdos en la memoria. Hasta los 4-5 años tenemos un hipocampo en constante dinamismo que afecta al proceso de consolidación a largo plazo de los recuerdos.

Este estudio desbanca las anteriores teorías que asumían que el origen de la amnesia infantil se asociaba al desarrollo del habla, proceso superior que se suponía asociado a la creación de memorias a largo plazo. Este estudio parece indicar algo muy diferente.

A pesar de no ser suficiente para afirmar directamente una causa, si que abre pie a nuevas investigaciones y da luz sobre un tema que lleva mucho tiempo sin ser comprendido. La amnesia infantil ha sido un misterio que ahora puede que estemos cerca de descubrir.

Fuente: BBC News