Ellas prefieren a los hombres de pocas palabras

Normalmente esto es lo que nos venden las películas típicas románticonas (o pastelazos, como les llamo yo): El tío callado y serio acaba llevándose a la chica. No se vostr@s, pero yo aún hoy en día sigo buscándole la lógica a este cliché, y sigo sin encontrarla. Pero como ya sabéis, tanto en ciencia en general como en psicología en particular hay muchas veces que la lógica no existe y es necesario tirar de estudios. Y es lo que haremos hoy, confirmar este cliché, gracias a un estudio.

Según se publica en la revista PLoS ONE, un estudio ha encontrado que las mujeres prefieren a los hombres que usan oraciones breves y palabras con una media de longitud más corta, mientras que los hombres que utilizan un lenguaje demasiado verboso son menos atractivos. Es decir, ellas prefieren a los hombres concisos y de pocas palabras.

Eso sí, había una excepción: Cuando las voces eran extranjeras, la brevedad o lo cortas que fueran las palabras no importaba, ya que el atractivo de dicha voz se basaba en lo exótica que sonaba por ser extranjera.

Dichas conclusiones son el resultado de una encuesta hecha a estudiantes canadienses, donde los hombres opinan que esta preferencia por parte de las mujeres se debe a que ellas utilizan palabras más largas, y por ello relacionan las palabras cortas con el sexo masculino.

Además, durante las encuestas, los investigadores también detectaron que se prefería a una persona con voz similar a la del voluntario que contestaba la encuesta. Aquellos hombres cuyas voces sonaban provenientes de una persona grande eran más populares, mientras que las mujeres que sonaban con una “voz entrecortada” (muy al estilo de Marilyn Monroe) eran preferidas frente a otras con la voz “ronca” como Kim Kardashian, ya que las entrecortadas suenan más jóvenes y saludables.

Finalmente, según comenta Molly Babel, profesora de lingüistica de la Universidad de Brtish Columbia:

“La voz es una herramienta increíblemente flexible que utilizamos para construir nuestra identidad. Una vez que esté fuera de un cierto rango de familiaridad, las voces novedosas que suenan exóticas pueden resultarnos más atractivas”