Hoy día se reconocen la mayoría de sensores de movimiento por las cámaras que ocupan la mayor parte del dispositivo. Sin duda, es uno de los motivos por los que Kinect no ha resultado demasiado exitoso es el espacio que ocupa y la imposibilidad de ubicarlo correctamente en algunos hogares.

Pero, ¿y si todos estos aparatos se toparan con una tecnología capaz de percibir el movimiento sin ningún tipo de cámara? Pues es algo que podría llegar muy pronto y que tendría más aplicaciones de las que pensáis.

Aún más útiles de lo que crees

Sensores así, de pequeño tamaño, podrían usarse en todo tipo de dispositivos, teniendo como primer objetivo el mundo de los smartphones. Imagina la cantidad de utilidades que podría tener el uso de tu teléfono mediante gestos. Os enseñamos un poco de qué va la cosa.

De bajo coste y sin baterías externas

Una de las mejores bazas de estos sensores de los que os hablamos es que funcionan sin baterías externas. Podrían instalarse en cualquier teléfono móvil sin que éstos sufrieran ningún perjuicio en sus baterías, ya que gastan cuatro veces menos que los sensores actuales. 

Además, tienen un coste totalmente asequible para cualquier empresa que quiera incorporarlos en sus aparatos.

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Su funcionamiento consiste en un sensor que utiliza receptores de potencia ultra-baja para extraer y clasificar información gesticular a partir de la transmisión de ondas inalámbricas. Cuando alguien hace movimientos con su mano, cambia la amplitud de estas señales, y entonces el sensor compara los resultados con la señal original.

El objetivo a largo plazo del proyecto, que lleva el nombre de “AllSee”, es que el producto se aplique en el mayor número de aparatos de la casa con el fin de que podamos interactuar con ella en la mayor medida posible.

Os invitamos a que le sigáis la pista a este nuevo invento y que, por supuesto, deis vuestra opinión comentando aquí mismo.

Fuente | Washington.edu