Estamos bien entrados en verano, y ya sabéis lo que eso significa: helados para refrescarnos (a menos que vivas en el hemisferio sur, en cuyo caso puedes ignorar lo que he dicho). ¿Y cuál es la manera mas tecnológicamente avanzada de comer helados? Pues con una impresora 3D, que están muy de moda, o al menos eso es lo que piensa un grupo de estudiantes del MIT que se han embarcado en un proyecto muy particular. La verdad es que decir “impresora 3D de helados” suena a lo mas simple del mundo, pero en realidad tiene mucho mas trabajo e investigación detrás de lo que parece.

Helados a la carta

Y es que la consistencia que tiene el helado no es la mejor para crear estructuras llamativas; cualquiera puede servir helado en un cucurucho, pero el proyecto quería usar impresoras 3D para atraer la atención de los mas pequeños hacia este tipo de tecnología. Quién sabe, puede que dentro de 20 años los mejores ingenieros del mundo hayan elegido este camino porque comieron helado impreso en 3D. Por lo tanto, no bastaba con servir una montaña de helado en una bandeja, sino que había que darle forma.

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Para ello usaron nitrógeno líquido comprimido mientras que el helado caía, que le daba la suficiente consistencia como para crear estructuras; pero hasta que llegaron a encontrar la presión y la cantidad ideal para crear una estrella sufrieron muchos imprevistos, y como los propios estudiantes reconocen, tuvieron que comer muchos helados deformes en las noches en vela en las que se pelearon con el sistema. Pero quién sabe, puede que los próximos veranos veamos puestos de helados con este tipo de sistemas.

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Fuente | Techcrunch