30 años del primer portátil de producción masiva
Se han cumplido 30 años del primer portátil de producción masiva, el Toshiba T1100.
28 abril, 2015 22:32Noticias relacionadas
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Los ordenadores portátiles son hoy incluso más comunes que sus hermanos de sobremesa; y todo dio inicio hace más de treinta años con entre otros, el primer portátil de producción masiva.
El Toshiba T1100 no puede decir que es el primer portátil de la historia, pero casi. Al fin y al cabo, ya existían modelos de producción limitada o prototipos que jugaban con la idea de llevarnos el trabajo encima, novedosa en su momento.
Se acababan los 60 cuando a Alan Kay se le ocurrió que los ordenadores podían ser portátiles, un concepto que llamó Dynabook; hay que tener en cuenta que los ordenadores de sobremesa eran extremadamente raros entonces y por lo tanto el concepto de un portátil era poco menos que futurología.
Pero el ritmo al que avanzaba la tecnología hizo posible hacer realidad el concepto, hasta cierto punto. Los primeros prototipos eran enormemente pesados, como el IBM 5100 que pesaba 24 kg, hasta el punto de que llamarlos “portátiles” era ser muy generoso.
Cuando llegaron los 80 la tecnología ya había avanzado, hasta el punto de que el concepto del Dynabook pudo hacerse realidad, al menos en teoría. Era de la compañía Epson y se llamaba HX-20, y está reconocido como el primer ordenador con el tamaño y peso (1.6 kg) que nos esperamos de la palabra “portátil”. Sin embargo, limitaciones como su pantalla de apenas cuatro líneas y la falta de software escrito especialmente para el ordenador lo condenaron al olvido.
A partir de entonces hubo muchos modelos que intentaron encontrar un mercado que parecía evidente que existía, pero nadie conseguía explotar. El Gavilan SC, por ejemplo, fue el primer ordenador en ser vendido como “portátil”, además de ser el primero con un touchpad que nos permitía controlar el dispositivo con el toque, pero con un precio de 4.000 dólares de la época (casi 10.000 dólares actuales) estaba al alcance de muy pocos.
Así era el primer portátil de producción masiva del mundo
Entre una cosa y otra llegó 1985 y todavía no había un claro camino para el ordenador portátil. Y en ese clima llegó el Toshiba T1100, que la compañía presume fue el primer portátil de producción masiva del mundo.
Con una pantalla monocromática de 9.1 pulgadas, era lo suficientemente grande y con una resolución adecuada para trabajar. Con 4.1 kg. de peso, también se podía llevar encima (aunque evidentemente no como los portátiles actuales).
Además, contaba con hardware que en otros modelos eran añadidos, como la disquetera de 3.5 pulgadas. También ayudaba que fuese IBM PC compatible; todo eso ayudó a que se vendiesen 10.000 unidades el primer año, que no suena a mucho pero que era toda una revolución en el mercado de entonces.
A partir de aquí es, como suele decirse, otra historia. El ordenador portátil ya era un dispositivo tan útil como uno de sobremesa, o incluso más dependiendo de nuestras circunstancias.
Aunque tradicionalmente su potencia siempre ha ido por detrás debido a la necesidad de depender de una batería, en la actualidad, y con procesadores que cada vez consumen menos, ya es posible comprar un portátil y no notar esa diferencia. Y pese a que las tablets son competidoras directas, el portátil aún tiene mucha vida por delante.