Tecnología

Consiguen controlar células cerebrales mediante ondas de sonido

20 septiembre, 2015 18:05

El control mental o cerebral ha sido carne de ciencia-ficción casi desde que se inició tal género cinematográfico. Y así suena, a ciencia-ficción, ¿pues a quién no le gustaría controlar las neuronas de otro individuo mediante ondas de sonido? Suena futurista, e incluso imposible, pero un grupo de científicos del Instituto Salk de Estudios Biológicos (California) lo ha logrado recientemente mediante modificación genética de las células cerebrales para que respondan al sonido. Por el momento, solo en nematodos (gusanos), pero es un gran principio.

El control cerebral mediante ondas de sonido es posible

El trabajo, publicado recientemente en Nature Communications, demuestra como es posible combinar la modificación genética neuronal junto al uso de microburbujas para controlar el movimiento de nematodos desde sus mismas células cerebrales. Si antes disponíamos de la optogenética o control neuronal mediante luz, ahora hablaríamos de sonogenética, donde se usan ondas sonoras para activar o apagar neuronas. Pero el asunto no acabaría aquí, pues también podría usarse para el control de células del corazón o células musculares para controlar su movimiento y acción.

En el caso de la mencionada optogenética, se usan proteínas especiales sensibles a la luz que se añaden a neuronas específicas de una zona cerebral, pudiendo así activarlas o inhibirlas mediante luz láser. Dicho procedimiento se complica si las células están demasiado profundas, pues la luz se dispersa. En el caso de la sonogenética el asunto es menos invasivo, pues las ondas sonoras de baja frecuencia pueden atravesar tejidos e incluso hueso con mayor facilidad.

Para demostrar estas ventajas, los investigadores californianos usaron nematodos, un tipo de lombriz que normalmente no responde a los ultrasonidos. Sin embargo, en este caso se les añadieron fluidos llenos de burbujas alrededor y se aplicaron ondas de ultrasonidos (como las usadas en las ecografías) que fueron amplificadas por las burbujas del fluido antes de contactar con los gusanos. Dichas ondas de sonido se dirigieron a estructuras específicas, los canales PRT-4. Cuando dichos canales se abren, responden a las ondas de sonido. En el experimento se modificó genéticamente a los nematodos para que tuvieran canales PRT-4 en sus neuronas, llegando así a poder controlarlos mediante ultrasonidos.

Futuras terapias con optogenética y sonogenética

Como comentábamos al inicio, el experimento tan solo se ha llevado a cabo en gusanos, pero el equipo confía en que tanto la optogenética como la sonogenética puedan llegar a usarse en seres humanos como formas de tratamiento no invasivo.

Una idea sería usar una combinación de terapia génica y un virus terapéutico diseñado específicamente para actuar en las neuronas humanas, las cuales serían susceptibles temporalmente a los ultrasonidos, pudiendo así usarse esta técnica como forma de terapia neurológica. Otras vías de tratamiento incluirían enfermedades musculares, o las mismas células pancréaticas productoras de insulina, entre otras grandes y futuristas ideas.

Vía | IFLS.

Fuente | Nature Communications.