El llanto asociado al orgasmo
Muchos tipos diferentes de orgasmo
A nivel fisiológico el orgasmo, como os hemos explicado otras veces, consiste en una serie de contracciones rítmicas muy placenteras, con un intervalo de 0’8 segundos en la zona de la vagina, la vulva, el útero, el periné y el esfínter anal. Sin embargo, desde un punto de vista más subjetivo, cada mujer es diferente a la hora de exteriorizar ese placer. Las hay escandalosas, silenciosas, habladoras, incluso algunas aseguran perder el sentido durante un breve instante. Entre todo ese abanico de posibilidades el llanto es, simplemente, una forma más. Básicamente, cuando el orgasmo llega a ser extremadamente placentero, en ocasiones el éxtasis lleva a las lágrimas, sin previo aviso.
Un subidón también para la pareja
Según algunas encuestas, el llanto durante el orgasmo, además de suponer una experiencia increíble para quién lo siente, también lo resulta para su pareja. Al principio puede que, al ver las lágrimas, se puedan sentir asustados, pero al ver que ese llanto demuestra un placer inconmensurable, supone un chute de autoestima increíble, como podréis imaginar. Además, el placer también es mayor si vemos disfrutar a nuestra pareja, eso está claro. Como ejemplo, uno de los hombres encuestados afirmó haber dejado a una pareja porque, después de haber llorado una vez, ya nunca volvió a hacerlo.
Por lo tanto, si alguna vez lloráis o veis llorar a vuestra pareja durante el orgasmo, no os asustéis. Simplemente es una señal de que la cosa ha ido genial. Eso sí, no os frustréis si nunca os ha pasado, pues no significa que no hayáis sentido suficiente placer. Al fin y al cabo, no todo el mundo llora con la muerte de la madre de Bambi, pero a todos nos da pena, ¿no? Pues esto es lo mismo. Simplemente, disfrutad de vuestros orgasmos. Vengan como vengan.
Vía Elle El País