La policía holandesa ya entrena águilas cazadoras de drones
El cuerpo de policía holandés ha iniciado el entrenamiento de águilas cazadoras de drones que son capaces de capturar cualquier aparato.
1 febrero, 2016 18:10Noticias relacionadas
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En lo que probablemente sea la metáfora más bonita que nos hemos encontrado en mucho tiempo, la policía holandesa está entrenando águilas cazadoras de drones.
Naturaleza contra tecnología, ¿quién gana? Es un enfrentamiento que ha dado lugar a todo tipo de historias, y que ahora se ha hecho realidad gracias al problema de la popularización de los drones.
Por nuestros cielos vagan cada vez más aparatos, algunos con más pericia que otros; el peligro de los drones es bien conocido, como nos recuerdan algunos incidentes en los que la cosa podría haber acabado mucho peor.
Usando la naturaleza para luchar contra la tecnología
Por eso cada vez más países han presentado nuevas leyes que buscan regular como buenamente pueden el uso de estos aparatos, o algunos como España intentan maquillar leyes ya existentes. A lo que quiero llegar es que el cielo no es un lugar libre de ley, y que lo que hagamos con un aparato volador puede tener consecuencias para muchas vidas.
Pero, ¿cómo puede la policía aplicar estas leyes? Si hay un drone que está impidiendo que un helicóptero médico despegue para una emergencia, ¿cómo lo paran? Una opción es ir a por el que lo controla, pero ¿y si es autónomo? ¿Le disparas, intentas interferir en sus comunicaciones?
La policía holandesa ha preferido aprender de la naturaleza, y ha iniciado el entrenamiento de águilas cazadoras de drones que se encargarán de abatir los aparatos sospechosos o que pongan vidas en peligro. Para ello se han asociado con Guard from Above, una empresa danesa especializada en el entrenamiento de aves rapaces.
Águilas cazadoras de drones que no dejan escapar a su presa
Estas águilas son entrenadas para identificar drones cercanos y capturarlos al momento. Una vez en sus garras, el águila busca entonces un lugar seguro y alejado de grupos de personas para soltarlo en el suelo (y atacarle si tiene oportunidad). La principal ventaja respecto a las interferencias de radio (jamming) es que así se evita que el drone pierda el control y acabe provocando daños materiales o personales al caer.
Pese a estas ventajas, el uso de aves para cazar drones no siempre es posible. En el caso de drones grandes, las aspas podrían hacer mucho daño al animal y poner su vida en peligro, por lo que por el momento sólo se usan con drones pequeños, del tamaño de un DJI Phantom; aunque para el futuro cercano ya están desarrollando protecciones.
Las pruebas aún durarán unos meses hasta que la policía holandesa decida usar estos animales.