El simple truco para controlar la cantidad de calorías que tomas

Los investigadores de la Universidad de Pennsylvania nos acercan este simple truco para controlar la cantidad de calorías que tomas.

Es verano, tenemos más tiempo libre que aprovechamos para salir a comer, organizar comidas con familia y amigos, y las calorías no nos preocupan tanto. Pero luego llega el otoño y notamos esos kilitos de más, lamentamos los atracones que nos pegamos e intentamos buscar una solución para ajustarnos la ropa de temporada.

Para llevarnos mejor con nuestra alimentación, comiendo sin miedos pero con cabeza, los investigadores de la Universidad de Pennsylvania nos ofrecen con un estudio dirigido por Eric M. Van Epps un truco para controlar la cantidad de calorías que tomamos.

Pedir con una hora de antelación: El truco para controlar las calorías

Pedir comida

¿No os pasa que vais al supermercado a comprar y si tenéis hambre compráis muchas más cosas? Pues lo mismo ocurre cuándo vas a comer a un restaurante. Usando esta lógica, los investigadores intentaron dar con el tiempo exacto que debemos tomar para pensar que vamos a comer con el fin que el hambre no nos lleve a pedir “los alimentos prohibidos” (comida basura, altamente calóricos…)

De esta forma llevaron a cabo dos experimentos, con un total de 700 empresarios y 195 universitarios que se publicaron en Journal of Marketing Research.

En el primero, se les indicó a los empleados que decidiesen su pedido después de las 7 de la mañana, siendo el tiempo de recogerlo de 11 a 2. Los resultados hablan por sí solos, pues los investigadores encontraron que por cada hora de anticipo al pedido se consumían 38 calorías menos.

En el segundo, se les asignó aleatoriamente la hora a la que tenían que pedir la comida. Al igual que con el experimento anterior, se encontró que los empleados cuya hora asignada era la más temprana, elegían comidas con menos calorías.

Contando la cantidad de calorias

calorias

Aunque esta diferencia de apenas 40 calorías parezca pequeña, si la contamos por cada comida diaria y en todos los días de una semana, llega a convertirse en una diferencia notable. Si hacemos cuenta, considerando 3 comidas al día, durante 1 mes con este truco estaríamos perdiendo unas 2700 calorías, más de la que un hombre  adulto de 90 kilos tomaría en un día.

Ahora nos desplazamos a la universidad, dónde entrevistaron al grupo de estudiantes. Fijándose en la cantidad de calorías que tenían los alimentos que elegían los universitarios, encontraron una diferencia de 100 calorías entre los que pedían antes del almuerzo y los que pedían justo a la hora de comer.

Este truco puede ayudarte a perder peso, pero por supuesto no es una técnica eficaz si se realiza sin una dieta adecuada, algo de ejercicio y sobre todo, evitando los atracones nocturnos o el abuso de la comida basura.