sentido_tacto_tetraplejico

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Tecnología

Devuelven el sentido del tacto a un hombre tetrapléjico gracias a un chip cerebral

Recuperar el sentido del tacto tras sufrir un accidente y quedar tetrapléjico suena imposible. Sin embargo, un revolucionario brazo robótico puede lograrlo.

14 octubre, 2016 10:32

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Ya el pasado año 2012 fue posible crear un brazo robótico controlado por la mente, el cual ayudó a Ene Scheuermann a alimentarse por si misma.

Ahora, el mismo equipo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh, con el soporte de DARPA, responsables de aquel hito vuelven a la palestra con una gran novedad en el mismo campo. No solo han sido capaces de crear un brazo robótico controlado por la mente, sino que dicho brazo es capaz de recuperar el sentido del tacto a través de la mano.

El afortunado en este caso ha sido Nathan Copeland, un joven de 30 años que sufrió un accidente de tráfico con tan solo 18 años, dejándole totalmente tetrapléjido desde entonces y sin sensibilidad alguna desde el cuello hacia abajo. Ahora, gracias a este nuevo brazo robótico y 32 electrodos en el cerebro, Copeland ha vuelto a sentir su mano tras más de una década, como describe el estudio publicado en Science Traslational Medicine.

El hombre tetrapléjico que ha conseguido recuperar el sentido del tacto

Nathan no cabe en sí de alegria. Anteriormente no tenía sensibilidad alguna, y ahora gracias a este nuevo brazo robótico de la Universidad de Pittsburgh es capaz de sentir cada uno de sus dedos. Bueno, gracias al brazo y a un par de placas metálicas con 32 electrodos implantadas en sus dos áreas somatosensoriales primarias cerebrales, las áreas responsables del sentido del tacto.

Y no solo hablamos de recuperar el sentido del tacto a groso modo, sino que Nathan es capaz de identificar presiones con una sensibilidad asombrosa. En un inicio había algunos problemas y Nathan sentía hormigueos u otras sensaciones, incluso le cuesta sentir el frío o el calor, algo que queda como asignatura pendiente. Todas estas cualidades pertenecen al sentido del tacto o mejor dicho, sistema somatosensorial.

Cabe destacar, asimismo, que hablamos de una técnica bastante invasiva: Es necesario implantar electrodos, por pequeños que sean, directamente en el cerebro. El resultado ha sido exitoso, pero no sabemos cómo evolucionarán pasados los años, y si tendrán algún impacto negativo a nivel cerebral.

El futuro de los brazos robóticos

nathan_copeland

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En el caso de Nathan aún quedan algunos flecos por pulir. Es cierto que puede sentir diferentes presiones y diferenciar cada uno de sus dedos, e incluso mandarles señales para moverlos de forma ágil y versatil, Se trata de una retroalimentación muy lograda gracias a los mencionados microelectrodos. Sin embargo, la diferencia de temperaturas dentro del sentido del tacto es necesaria, y aún no se ha conseguido.

Los investigadores de la Universidad de Pittsburgh reconocen que aún queda un largo camino por recorrer hasta llegar a un sistema que imite perfectamente al sistema somatosensorial humano, que sea real o al menos se le parezca lo suficiente. Creen que su método de “microestimulación” es seguro, y que las sensaciones son más naturales que un simple hormigueo. A pesar de ello, aún serán necesarios muchos ensayos con muchos más pacientes, pues no debemos olvidar de que tan solo se ha creado un único brazo robótico con sentido del tacto similar al humano. Queda mucho trabajo por hacer.