El CSI holandés ya usa realidad aumentada para analizar escenas de crímenes

El uso de realidad aumentada por la policía ya se está probando en Holanda.

En series policíacas como CSI a menudo se nos muestra a los personajes analizando una escena del crimen con sorprendente precisión.

Son capaces de encontrar hasta una mota de polvo que no debería estar ahí; por supuesto, después de analizarla pueden solucionar el caso que de otra forma hubiese quedado sin resolver.

En realidad es un poquito más difícil; imagínate ser de los primeros en llegar a una escena, y tener la responsabilidad de que no se te pase nada incriminatorio.

El uso de realidad aumentada por la policía ya ha empezado en Holanda

Por muy bien entrenados que estén estos agentes, es fácil que un pequeño detalle pueda pasarse por alto, o que no entiendan algo que sobrepasa sus conocimientos.

Ahora, para facilitar este trabajo la policía holandesa ha iniciado un programa piloto de dispositivos de realidad aumentada para sus agentes.

Los dispositivos han sido desarrollados durante cinco años en la Universidad de Tecnología de Delft, en colaboración con el Instituto Forense de los Países Bajos; sus creadores creen que el hardware y el software ya han madurado lo suficiente para ser usado en la ley.

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El sistema consta de una cámara que los agentes llevan en el hombro, y que retransmite toda la escena a un equipo de expertos forenses; este grupo puede analizar el vídeo en tiempo real y marcar zonas, añadir notas y solicitar más información.

Por ejemplo, pueden marcar una botella con una flecha y añadir una nota para que el equipo la procese; también pueden solicitar la comprobación de huellas en ciertas zonas, buscar ADN y más. Los agentes verán esas órdenes en sus dispositivos.

Un equipo de expertos que analiza la escena del crimen con el policía

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Así, el agente tiene a su disposición un equipo de expertos que está a kilómetros de distancia. Dependiendo del caso, incluso es posible pedir opinión a especialistas en ciertos campos como la química.

Las primeras impresiones del sistema son positivas; permiten reducir la cantidad de gente en una escena y evitar contaminar pruebas sin querer.

El uso de realidad aumentada por la policía aún tiene obstáculos; aún no está claro si el sistema judicial aceptaría pruebas conseguidas con este método.