Tras meses de investigación, Samsung anuncia cuales fueron las causas que acabaron con la muerte y retirada del mercado del Samsung Galaxy Note 7.
El Note 7 pasará a la historia de Samsung y no por el éxito que pudo haber tenido en ventas, ya que era un smartphone fantástico y para muchos el mejor del año, sino por los sucesivos fallos en decenas de unidades que acabaron con teléfonos incendiados y muchos ‘sustos’ a lo largo de todo el planeta.
Como estaba previsto, Samsung Electronics ha convocado una rueda de prensa para explicar con todo detalle, cosa que se agradece, cuáles fueron las causas que provocaron los problemas del Note 7 y, como se había filtrado hace unas semanas, fueron las baterías.
Fallos en las baterías del Note 7, fabricadas por distintas empresas
Todo lo que pudo salir mal, lo hizo. El fabricante surcoreano utilizó en el Samsung Galaxy Note 7 baterías fabricadas por dos empresas diferentes y ambas tuvieron defectos distintos que provocaron las deflagraciones del terminal.
En ningún momento durante la rueda de prensa ni en los comunicados se ha especificado cuáles eran las empresas tras las baterías, pero lo cierto es que ya conocíamos que se trata de Samsung SDI, una de sus filiales, y ATL (Amperex Technology Limited).
En las primeras baterías el problema estuvo en la separación de las capas del ánodo y cátodo, que en una de sus zonas se veía sometida a una compresión que, con los ciclos de carga, acababan como ya todos sabemos. En el caso de las baterías ATL también presentaban un defecto de fabricación entre esas capas que, junto a soldaduras mal acabadas, formaron un cóctel en forma sobrecalentamiento y posterior incendio.
Los problemas en las baterías del Note 7
El nuevo proceso que pasarán todas las baterías de Samsung
Samsung ha publicado todos los detalles de cómo han llevado a cabo la investigación del Note 7. En total han dedicado 700 ingenieros a estudiar y examinar unos 200.000 terminales y 30.000 modelos de baterías, confiando además en organismos externos como TÜV Rheinland, UL y Exponent.
El Note 7 quedará en la memoria de Samsung y de muchos compradores, recordemos que se vendieron más de 3 millones de unidades y a día de hoy ya se han devuelto un 96% del total.
¿Y ahora qué? La crisis del Note 7 ha calado en Samsung y no están dispuestos a que vuelva a ocurrir un caso similar en el futuro, así que la compañía va a poner en marcha un sistema de verificación de baterías basado en 8 puntos. Aquí los detallan, pero van desde la ‘simple’ inspección visual para comprobar que no tienen defectos, hasta test intensivos de carga y descarga, inspección por rayos X, test de durabilidad, comprobación de voltajes y más.