Un timbre es un timbre. Los hay más rudimentarios que solo hacen sonar una campana electrónica, otros con cámaras (los videoporteros), pero al fin y al cabo la tecnología es la misma. Ahora, una compañía china quiere reinventar el timbre, y el proyecto tiene muy buena pinta. Recibe el nombre de Belle y está en plena fase de financiación mediante una campaña de crowdfunding.
Este timbre inteligente para smart homes te avisa únicamente cuando te necesite, evitando molestias innecesarias. Básicamente es un asistente virtual que habla en tu nombre y que atiende a los visitantes de tu casa. Si es un vendedor puerta a puerta, por ejemplo, no solicitará nuestra presencia y simplemente le despedirá (también podremos hacerlo por nosotros mismos). Y lo mejor de todo es que permanece en servicio las 24 horas del día (al fin y al cabo es un robot, y no descansa).
Belle, capaz de atender a cualquier persona por ti
Cuenta con reconocimiento facial, por lo que a los visitantes recurrentes acabará por conocerlos (a tu madre, que viene a traerte los tuppers de comida todos los días, por ejemplo). Para reconocer a una persona, basta simplemente con que visite nuestra casa más de dos veces. Al reconocer a una persona, podrá mantener una conversación más personal con ella, por lo que el servicio será más eficiente.
Este timbre es como una secretaria que determina si debe molestarnos o no, entre otras funciones
Incluso también es capaz de permitir la entrada a personas autorizadas, como por ejemplo de nuevo a nuestra madre, cada vez que venga, incluso cuando no estemos en casa.
Además, al reconocer a personas, sabrá a quien deberá dirigirse en cada momento. Imagina por un momento que vives en una casa con otras tres personas, y cada uno tiene dos amigos. Este timbre inteligente acabará por saber de forma automática a qué huésped hablar cada vez que venga un amigo o conocido suyo, en vez de molestar enviándole la notificación a los tres al mismo tiempo (porque, efectivamente, las visitas llegan al teléfono).
Desde el teléfono podremos saber en cada momento quién está detrás de la puerta, además de ver en vivo la retransmisión de la imagen. También tiene visión nocturna infrarroja para funcionar de noche y bajo iluminaciones escasas.
Y si no estás en casa, ¡el visitante puede dejar un mensaje! Si viene alguien mientras no estamos y mientras no podemos atender al teléfono, el propio asistente sugerirá al visitante dejar un mensaje de vídeo que quedará guardado y que posteriormente podremos ver.
Cuesta 129 dólares, y muchas de las unidades en preventa ya están agotadas.
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