Google está apostando muy fuerte por la Inteligencia Artificial o IA. Al ser una empresa que cree en el avance, Google quiere implementar esta increíble tecnología a todos los ámbitos que pueda para así automatizar servicios que hasta ahora no lo eran. Por ello, por fin, usarán IA en medicina real.
¿Cómo? Su primer paso ha sido absorber DeepMind, o al menos parte de su equipo dedicado a la inteligencia artificial con su sede en Londres. Esta empresa es famosa por Streams, una aplicación para móviles destinada a la monitorización médica en el servicio sanitario inglés que pasará a cambiar a favor del propósito de Google.
Google quiere “asistentes IA para enfermeras y doctores”
Así lo ha anunciado la misma Streams en su blog, en el que consideran como un “hito importante” este cambio. Afirman que Streams, que hasta ahora ayudaba al Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido, pasará a ser “un asistente con Inteligencia Artificial para doctores y enfermeras” que usan“los mejores algoritmos con un diseño intuitivo”. Streams, como decimos, ahora mismo está siendo usada como una forma de ayudar a los profesionales de la salud a administrar a los pacientes.
Esta absorción provocará la creación de diversos proyectos que ya están sobre la mesa. Por ejemplo, el uso de IA para detectar enfermedades oculares en exploraciones de rutina. Esto implica que la IA se usará en medicina, un campo especialmente delicado que tiene connotaciones sobre la salud, no como el arte o la industria.
Una decisión no exenta de polémica
La noticia tiene una relevancia adicional, sobre todo en terreno inglés. Reino Unido ha sido contrario a los acuerdos entre DeepMind y la NHS de Inglaterra, ya que según el país supone un problema en la privacidad de los pacientes por no saber el uso que se le da a esos datos. Los encargados del manejo de datos del Reino Unido determinaron en 2017 que la asociación DeepMind con el NHS era ilegal, ya que las personas no habían sido informadas adecuadamente sobre cómo se utilizarían sus datos médicos.
Además, esto ha generado un debate razonable: el ente detrás de este acuerdo es Google, y eso genera dudas sobre si Google tendrá acceso a esos datos que son especialmente sensibles debido a que son de carácter médico. De todas formas, esto no tiene por qué ser posible debido a que Google está adquiriendo a parte del equipo de desarrollo de IA, por lo que no tendría por qué.
Pero sigue habiendo incógnitas. The Verge se ha puesto en contacto con DeepMind por este asunto, y según un informe de CNBC, la junta de revisión independiente de DeepMind establecida para supervisar su trabajo de salud probablemente se cerrará como resultado de la mudanza del equipo.
Independientemente de todo esto, que Google enfoque sus esfuerzos en el desarrollo de Inteligencia Artificial en el mundo de la medicina es excitante cuanto menos; los avances en IA ayudarán a acelerar los de la medicina, y sabiendo lo hábiles que son los de Google con el software y con este campo, podremos ver mejoras en poco tiempo. Habrá que ser pacientes.
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