La revolución del DIY (Do It Yourself) que hemos vivido en los últimos años nació gracias a Raspberry Pi, y sus mini-sistemas con todo lo necesario para crear nuestros propios proyectos. En una pequeña placa, tenemos procesador, memoria, y todo lo necesario montar un pequeño ordenador, un servidor, o un dispositivo del Internet de las Cosas.

Desde entonces, han salido muchos competidores, pero las Raspberry Pi han seguido evolucionando, con nuevas versiones cada vez más completas y potentes. Pero sobre todo, a precios muy bajos, lo suficiente como para atraer a mucha gente aunque sólo sea por curiosidad.

Así es la primera tienda de Raspberry Pi

Raspberry Pi es un fenómeno tan grande, que ya hasta hay tiendas dedicadas en exclusiva a sus productos. La primera tienda física dedicada sólo a Raspberry Pi ha sido abierta en Cambridge, Reino Unido; y tiene pinta de ser una visita obligada si vas a pasar por allí.

Porque sus creadores afirman que es algo más que una tienda. Sí, por supuesto que puedes encontrar los diferentes modelos de la Pi; y cómo no, encontrarás todo tipo de accesorios y piezas para usar en tus proyectos, desde carcasas hasta accesorios. Hasta puedes encontrar “merchandising”, en forma de tazas, libros y peluches inspirados en la marca.

Pero seamos sinceros, el cliente habitual de Raspberry Pi no va a tiendas físicas a comprar el nuevo modelo. No, en realidad esta tienda está pensada para iniciar a novatos en el DIY. En el centro de la tienda hay un banco con ordenadores ya montados y demostraciones de lo que es posible hacer con una Raspberry Pi; y la tienda en sí se parece más a un taller de trabajo, en el que podemos descubrir nuevas ideas.

Este puede ser sólo el principio de una cadena de tiendas que lleve las maravillas del DIY a más gente.