Y se acabó. Tras semanas de incertidumbre, de agobios, de incógnitas y sobre todo de miedo por parte de los miles de usuarios de dispositivos de Huawei, el bloqueo de Estados Unidos a la firma china ha llegado a su fin. El bloqueo por parte de Estados Unidos que impedía a Huawei tratar con empresas del país ya ha sido finalizado.

Esta decisión llega semanas después de que a Trump se le criticase por esta dura decisión por parte de sus propios socios y tras dejar el futuro del aire en un limbo muy incierto. Además de esto, y para fortuna de Apple, Trump no aumentará los aranceles a China. Al menos “de momento”, en palabras del propio Trump.

Trump levanta el bloqueo de Estados Unidos a Huawei

Según recoge Xataka, la decisión ha sido anunciada en la cumbre del G20 en Osaka, en una rueda de prensa. Trump ha expresado esta decisión con estas palabras: “Enviamos y vendemos a Huawei una enorme cantidad de productos que forman parte de lo que fabrican, y yo he dicho que eso está bien. Seguiremos vendiéndoles estos productos”

Las consecuencias del veto a Huawei no se hicieron de rogar. Tal y como cuentan nuestros compañeros en El Androide Libre, la caja de Pandora ya está abierta; el temor a depender únicamente de Google en su sistema operativo móvil y ver la facilidad con la que una empresa podría sufrir daños tales como ver sus ventas descender un 30 por ciento, ha suscitado el temor de muchos. Ya no únicamente por Android o por Google; por ver cómo pueden ver sus negocios muy afectados en un momento.

El veto además también tuvo sus críticas debido a su condición; según la administración Trump, Huawei representaba “un riesgo para la seguridad nacional” y no pocas miradas se posaron en el 5G como verdadero motivo para que Estados Unidos bloqueara a la firma. Después de todo, Huawei es pionera en esta clase de redes.

Faltan pasos que dar; las negociaciones con el gobierno chino siguen en marcha y Trump aseguró que este sería uno de los últimos temas que trataría con la administración del país en estos días. Además, falta que las empresas que abandonaron a Huawei como Google, Intel o ARM vuelvan a tener lazos con la firma. Quizás el veto ha acabado en susto, pero queda por ver las consecuencias a medio y largo plazo de ese susto.