¿El Gobierno controla lo que se envía por WhatsApp? El bulo que circula por las redes
Mensajes reenviados en las últimas horas por redes como WhatsApp y Telegram hablan sobre una conspiración del Gobierno para controlar las comunicaciones.
10 abril, 2020 15:57Noticias relacionadas
Varios mensajes que están siendo compartidos a lo largo del día de hoy afirman que el gobierno está controlando lo que se dice en WhatsApp; los mensajes están siendo compartidos de manera masiva en redes sociales y aplicaciones como la propia de WhatsApp.
En Omicrono hemos podido recibir ya dos versiones del mensaje, pero posiblemente haya más; aunque difieren en el contenido, la idea es básicamente la misma: el Gobierno habría implantado un bloqueo en WhatsApp para evitar el reenvío de mensajes contrarios a su gestión durante la crisis del coronavirus.
Sin embargo, a poco que se estudia el contenido de los mensajes es evidente que esta campaña aparentemente organizada está basada en interpretaciones, medias verdades, y mentiras directas.
Los mensajes de WhatsApp que acusan al Gobierno
Uno de los mensajes a los que Omicrono ha tenido acceso se centra en asociar esta supuesta medida del Gobierno con la periodista Ana Pastor y la empresa que fundó, Newtral, centrada en el desmentido de "noticias falsas" o "fake news", que tanto han dado que hablar en los últimos años.
El mensaje afirma que Facebook y WhatsApp están siendo "tuteladas y censuradas" por Newtral, con el objetivo de decidir qué contenido es "nocivo" para ayudar al gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos. Como gancho, se incluye un enlace a un medio de comunicación, normalmente a una noticia que habla de la limitación de reenvíos de mensajes.
El segundo mensaje que hemos podido leer habla de un "bloqueo en WhatsApp" para que los usuarios no puedan reenviar mensajes a cinco personas o grupos; responsabilizan de esta decisión al gobierno y su "control bolivariano", y también asocian a Ana Pastor con esta supuesta decisión.
Verdades a medias para colar bulos
Como es habitual con los bulos, estos mensajes están pensados y diseñados para que su audiencia potencial no se haga preguntas sobre las partes más absurdas; el truco suele estar en asociar una noticia real y conocida con el bulo, para dar veracidad a este último. De esta forma, al lector le será más fácil asociar la realidad con la mentira, ya que en su mente sabe que al menos una de esas cosas es verdad.
En este caso, la noticia real de la que se aprovecha esta cadena es que WhatsApp ha limitado los reenvíos de mensajes. Esto es verdad, y de hecho es una noticia que explicamos el pasado 7 de abril, en cuanto WhatsApp la anunció.
Es cierto que WhatsApp ya sólo permite reenviar mensajes a un chat cada vez, ya sea una persona o un grupo; es algo que probablemente ya habrás sufrido si usas WhatsApp, y de ahí que sirva como "ancla" para asociarla con la noticia falsa.
También es cierto que es una medida para luchar contra la desinformación contra el COVID-19. WhatsApp se ha dado cuenta de que limitar los reenvíos tiene un efecto directo en la cantidad de noticias falsas que son compartidas; eso es porque estos mensajes se suelen expandir con la ayuda de bots, que reenvían el mismo mensaje a tantos chats como sea posible para que lleguen a los usuarios y estos hagan el resto del trabajo.
Cuando WhatsApp implementó medidas contra los reenvíos en el pasado, como la inclusión de una doble flecha que indica que el mensaje no proviene de tu contacto, la cantidad de este tipo de mensajes se redujo en un 25%.
La crisis del coronavirus ha obligado a WhatsApp a implementar esta medida más dura, algo que no hizo ni siquiera cuando se compartían noticias falsas sobre políticos en periodo de elecciones.
El Gobierno no controla WhatsApp
Esa es una pista que debería indicarnos que el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos no tiene control sobre WhatsApp; si lo tuviese, le hubiera venido muy bien en las elecciones de hace apenas unos meses.
Pero en realidad estas pistas no hacen falta, porque la mejor prueba de que la acusación contra el Gobierno es falsa es que el cambio de WhatsApp se ha implementado en todo el mundo.
Como vemos en el blog de WhatsApp en inglés, la limitación de reenvío de mensajes se ha aplicado de manera global, no en un único país. Por lo tanto, no se ha aplicado para ayudar a un gobierno concreto, ni ha sido una orden del Gobierno de coalición; y por supuesto, Ana Pastor no está detrás de esta medida.
Da igual donde vivas o de qué signo político sea tu gobierno: no puedes reenviar mensajes de manera indiscriminada como antes. El motivo es evitar el reenvío de noticias falsas sobre el coronavirus, como tratamientos "milagrosos", fraudes con mascarillas, regalos falsos, o teorías conspiratorias de que en realidad no existe, como hemos visto en los últimos meses.
Se puede estar de acuerdo o no con esta medida, pero lo que es evidente es que no se ha tomado para proteger a un gobierno concreto de su gestión ante la crisis. El nombre de Ana Pastor y Newtral se añade a estos mensajes porque son objetivo habitual de la extrema derecha, cuyos bulos son examinados por ese sitio habitualmente.
La extrema derecha enseña a saltarse las medidas
Estos mensajes no solo intentan atraer a usuarios a su causa; también explican cómo saltarse la limitación de WhatsApp para poder seguir compartiendo bulos.
Uno de los mensajes da una lista detallada de pasos que hay que seguir para poder compartir mensajes con más personas; un método bastante simple, ya que implica copiar el mensaje y pegarlo en un nuevo mensaje en otro chat, en vez de pulsar el botón de "reenviar".
Además, los autores explican un método típico para saltarse la protección contra los bots y el spam, consistente en añadir un carácter más, como un emoji, para que el sistema automatizado no lo detecte.
Esta reacción demuestra que las medidas de WhatsApp han afectado seriamente a quienes se dedican a difundir bulos por las redes; y están usando nuevos bulos para intentar convencer a la población de que son víctimas, cuando en realidad no son más que el efecto colateral de las medidas contra el coronavirus.