Más allá de los barcos con zonas acristaladas o los afortunados que pueden bucear, el turismo submarino es el medio menos explotado actualmente. España se podría aprovechar de este sector que cuenta con fabricantes de submarinos específicamente diseñados para el turismo.
Un número de modelos capaces de adaptarse a prácticamente cualquier necesidad. Desde cabinas lo más parecidas a ascensores a auténticos 'autobuses' capaces de navegar debajo del agua durante horas. Lo último de esta compañía, denominada Triton y con sede en Florida, es un submarino más pequeño con espacio para 6 personas y una capacidad de inmersión extraordinaria.
El Triton 3300/6 es un submarino diseñado para soportar presiones de 1.000 metros de columna de agua (3.300 pies, de ahí el nombre) a un máximo de seis ocupantes. Según la propia compañía, "es el casco esférico de presión acrílico más grande del mundo" con un diámetro de nada menos que 2.5 metros.
La creación de este tipo de submarino tiene como finalidad que los viajeros sean capaces de ver todo el entorno, por eso esta 'bola' acristalada es la mejor ventana para observar los fondos marinos. Triton permite al comprador seleccionar diferentes configuraciones de asientos para la burbuja. Desde el máximo de seis con un espacio personal muy limitado a disposiciones de tan solo cuatro asientos.
Eso sí, en todas ellas el Triton 3300/6 cuenta con un sistema de aire acondicionado absolutamente fundamental para refrescar el aire dentro de la cápsula. El acceso al interior se realiza por una puerta situada en la parte trasera pasando justo al lado del asiento del piloto, situado pegado a la puerta para no interrumpir la visión.
En cuanto a especificaciones, este pequeño submarino cuenta con batería para realizar excursiones de más de 10 horas bajo el agua a una velocidad no muy elevada. La compañía informa que los dos motores de 12.5 kW cada uno impulsan al Triton hasta los 3 nudos, unos 5.5 kilómetros por hora de velocidad punta. El submarino también cuenta con unas luces LED para iluminar el fondo marino y así apreciar la naturaleza.
El peso total del Triton 3300/6 es de 11 toneladas con una longitud de 4.55 metros. Una mole que pesa el equivalente a 7 coches compactos y cuyo precio se sitúa en los 5.5 millones de dólares (unos 4.5 millones de euros). Lo que no ha trascendido es cuándo se podrá ver en funcionamiento con turistas. Lo que sí parece claro es que en un futuro no muy lejano podremos realizar viajes submarinos sin tener que enfundarnos en un traje de neopreno ni cargar con una botella.