La tecnología ha permitido realizar tareas cotidianas sin contacto en mitad de la pandemia. Desde pasar todos los controles de un aeropuerto, como ya se puede hacer en España, a seleccionar productos de una máquina expendedora sin tocar ninguna superficie.
Pero, por el momento, no hay forma de hacer las necesidades sin tocar nada en los baños públicos. Más complejo todavía si nos referimos a los baños japoneses, donde los inodoros tienen una botonera para seleccionar algunos modos de limpieza. Así que una compañía japonesa ha conseguido dar con la tecla: botoneras holográficas.
Los hologramas son una tecnología que está todavía por implantarse masivamente. Y aunque parezca de ciencia ficción, ya existen proyectos -como este japonés- que lo emplean satisfactoriamente.
Murakami Corporation, una compañía con sede en Shizuoka, es quien se ha lanzado con este proyecto de botones holográficos. Se trata de una empresa especializada en repuestos para automóviles, concretamente en el mundo de los espejos retrovisores, según recogen en Sora News.
Muramaki ha trabajado juntamente con la start-up Parity Innovations, con base en Kioto, con el único objetivo de sustituir los botones y pulsadores tradicionales por estas pantallas flotantes. a la tecnología desarrollada la han llamado Floating Pictogram Technology (Tecnología de Pictogramas Flotantes) y permite al usuario interactuar con los hologramas.
Igual que si fuera un panel táctil, pero en lugar de un cristal o plástico solo encontrará aire. El sistema incorpora un sensor de infrarrojos capaz de detectar cuando un dedo se acerca y dónde lo está haciendo. De esta forma, se pueden 'apretar' o seleccionar el botón deseado sin tocar ninguna superficie.
Otra de las ventajas es que un mismo sistema de proyección puede mostrar cualquier contenido. Al ser una mera proyección de vídeo, estos dispositivos de hologramas pueden ser utilizados para cualquier aplicación que se nos pueda ocurrir.
Además de los inodoros y demás elementos en los baños públicos, también sería buena idea aplicarlos en los cajeros automáticos o ascensores. Donde la botonera tradicional también suele ser una fuente de suciedad importante.
Del mismo modo, los hologramas pueden sustituir pantallas táctiles en aeropuertos, museos, kioskos para pedir en restaurantes de comida rápida o incluso como teclados virtuales en controles de acceso.
Los planes de Murakami, por el momento, son el de poner en funcionamiento este sistema en los inodoros japoneses. Si todo sigue su curso, el objetivo es comenzar con la producción en masa en el año 2022.
También te puede interesar...
- El coronavirus sobrevive en las pantallas de los móviles durante 28 días
- Este dispositivo limpia y desinfecta tu móvil de gérmenes
- Cómo desinfectar tu móvil de virus y bacterias
- La tecnología 'contactless', aliada sorpresa para frenar al coronavirus