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Una VPN resistente a la computación cuántica que amenaza las claves de ciberseguridad clásicas
Verizon crea una VPN a prueba de ataques cuánticos. Atravesando el océano Atlántico, la prueba ha demostrado que la nueva generación de claves criptográficas está en camino.
28 agosto, 2021 20:59Noticias relacionadas
Los sistemas de encriptación y ciberseguridad actuales que se utilizan en España y el resto de países tienen los días contados, la computación cuántica es capaz de descifrarlos con bastante facilidad. Antes de que esta tecnología se independice de los laboratorios en los que ahora evoluciona, se debe crear la próxima generación de claves criptográficas que resistan la era cuántica.
Proyectos de medio mundo plantean diferentes métodos y sistemas para blindar los datos de los futuros ataques cuánticos. Una de esas propuestas es la nueva VPN que Verizon ha puesto a prueba a través del océano Atlántico.
Desde Londres hasta la costa de Estados Unidos, esta red virtual privada ha demostrado que puede resistir el ataque de un ordenador cuántico y, por lo tanto, reemplazar los procesos de seguridad actuales con nuevos protocolos que en el futuro protegerán las conexiones en oficinas o casas de medio mundo.
Las VPN post-cuántica
Las VPN son herramientas bastante comunes, servicios de seguridad que ofrecen preservar la privacidad del usuario en cualquier red, incluso ante las más peligrosas como son las redes WiFi públicas. Cuando un usuario navega por la web protegido con una VPN, un servidor remoto filtra los datos de esta persona y el dispositivo con el que está accediendo a internet, para cifrarlos y evitar que le puedan rastrear.
Ordenador
La dirección IP y la actividad del usuario en las diferentes webs que visita, los correos que envía o los productos que compra, toda esta información resulta muy difícil de registrar por otros servidores o por piratas informáticos. Las VPN se han convertido en una herramienta clave para reforzar la seguridad ante el auge del teletrabajo y proteger los sistemas de las empresas desde las casas de los empleados.
Sin embargo, estas herramientas y los algoritmos matemáticos que utilizan para proteger las redes no suponen un esfuerzo muy grande de computación para las nuevas máquinas cuánticas, al contrario que pasa con los ordenadores actuales, que por muy potentes que sean encuentran la tarea extremadamente difícil.
Este escenario puede parecer aterrador, el nacimiento de ordenadores que aniquilan sin despeinarse la privacidad y seguridad de toda la tecnología creada en las últimas décadas. Sin olvidarnos de todos los beneficios que aportará a la tecnología, la computación cuántica no es mala en sí, depende del uso que se haga de ella, como ocurre con la informática clásica.
No hay que alarmarse, el problema se ha detectado a tiempo, la computación cuántica está aún en sus inicios, queda mucho para que llegue a ser una amenaza real. Mientras, ya se está desarrollando la nueva generación de claves criptográficas conocidas como criptografía post-cuántica.
Seguridad presente y futura
Verizon uno de los principales proveedores de servicios VPN, ha querido trabajar en el terreno que mejor conoce y prepararse para ese futuro. Sabre es el algoritmo que han utilizado para realizar la prueba entre Europa y América (de Londres a Ashburn, Virginia).
VPN.
Sabre nace de otro proyecto impulsado por el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) en EEUU en 2016. El NIST solicitó entonces a investigadores de todo el mundo que presentarán ideas para crear algoritmos resistentes a un posible ataque cuántico. Verizon eligió Sabre de entre los 15 algoritmos finalistas: "Probamos Sabre aquí, pero probaremos otros. Queremos tener esa flexibilidad, poder adaptarnos en línea con el proceso de estandarización", explica Venkata Josyula, directora de tecnología de Verizon a ZDNet.
De esta y otras investigaciones que se están realizando en Europa y Asia saldrán los estándares de encriptación del futuro y quizás también a corto plazo. Prevenir antes que curar, que se suele decir.
Puede que la computación cuántica no suponga un riesgo alto en las próximas dos décadas, pero también es posible que los piratas informáticos recopilen una ingente cantidad de datos robados y esperen a tener un ordenador cuántico para entonces revelar toda esa información.
