Los drones se han convertido en herramientas con múltiples posibilidades. En España ayudan a repoblar bosques o sirven como servicios de reparto, pero su función más espectacular es la de captar las mejores vistas y transportarnos al oro lado del mundo.
Si alguna vez te has planteado qué se debe sentir al caer por una catarata inmensa, ahora tienes la posibilidad de experimentar, al menos en parte, la explosión de adrenalina que genera una actividad tan extrema.
Gracias al trabajo del artista suizo, Ellis van Jason, la caída de más de 800 metros que recorre el agua en la catarata Salto Ángel en Venezuela, parece una experiencia menos peligrosa. Un dron será tus ojos en el trayecto.
La catarata más alta
El Kerepakupai Vená o Salto Ángel está considerada como la catarata más alta del mundo, aunque muchos la conocerán como la catarata de Up, la película de dibujos animados de Disney. En pleno parque nacional Canaima, en Venezuela, es un espacio natural protegido de muy difícil acceso.
Ellis van Jason asegura que él y su equipo dedicaron varios días a pie y en helicóptero para poder grabar estas imágenes espectaculares. "Ahora abróchate el cinturón de seguridad y disfruta del paseo por la cascada más alta del mundo" dice Jason.
Las imágenes están grabadas con un drone en formato FPV del término inglés "First Person View", es decir, con vista en primera persona. Este tipo de drones, aunque Jason no especifica el modelo, suelen utilizar gafas inteligentes que permiten al piloto sentir que va a bordo de la aeronave.
Como indica el término, con ellas se puede ver en tiempo real a través de las gafas lo que ve el dron. Es necesario que el dron integre cámaras, tanto para grabar la caída como para transmitir la imagen en el momento. De este modo, el usuario puede sentirse como si estuviera pilotando desde dentro del propio dron, lo que facilita realizar determinadas maniobras en el vuelo, además de ofrecer una inmersión total al piloto.
Sobre un volcán en erupción
Otro ejemplo de lo que pueden conseguir este tipo de drones y la pericia del piloto es este vídeo sobrevolando un volcán en plena erupción. La lava ardiendo caía por la ladera del volcán impronunciable, Fagradalsfjall, en Islandia y Joey Helms se decidió a grabarlo.
Helms explica que utilizó dos tipos de drones, un DJI MAVIC 2 PRO and DJI FPV. El primero es un dron plegable que DJI ha equipado con cámaras Hasselblad para conseguir la mejor resolución, mientras que el segundo modelo es el primer FPV que lanza esta marca y que se controla con un joystick similar al de un avión.
También te puede interesar...
- Nuevo DJI Mavic 2, el dron plegable se renueva con cámaras muy superiores
- Siente como si estuvieses volando en tu dron con estas gafas
- Los drones de reparto ya vuelan en Villaverde: de paquetes a comida a domicilio