Con la evolución de la tecnología los robots han comenzado a hacerse un hueco en las profesiones más insospechadas. Por ejemplo, existe uno que hace de mayordomo y que limpia encimeras y recoge objetos; y que aún no está disponible en España. En esta ocasión, una empresa ha creado una máquina capaz de cortar el pelo a una persona.

Ser peluquero exige una técnica y precisión, pero también algo de improvisación y arte. Aunque así de primeras no parezca una profesión adecuada para un robot, lo cierto es que existe uno, llamado Sawyer, que puede usar una maquinilla para cortar el pelo.

Sawyer es un robot fabricado por la empresa Rethink Robotics, una compañía afincada en Boston (Estados Unidos), y por ahora solamente es capaz de utilizar una maquinilla, y no unas tijeras. Para ello, este androide estira el brazo y corta el trozo de pelo que realmente pilla por el camino. Por lo tanto, su técnica no está realmente muy depurada.

Dos cámaras

Rethink Robotics es una empresa que se dedica concretamente a fabricar robots especialmente diseñados para colaborar con el ser humano, y nunca con el objetivo de que quiten un puesto de trabajo. De hecho, eso es algo que Sawyer no puede hacer, ya que solamente maneja la maquinilla y tampoco a la perfección.

Así es Sawyer, el robot peluquero.

Aunque este robot no es nuevo, sino que se anunció hace un año; lo cierto es que aún sigue siendo desconocido para una gran mayoría de público. Se trata de una máquina que posee un brazo robótico con 7 grados de libertas y un alcance de 1.260 milímetros; que está acompañado por dos cámaras.

Gracias a su pantalla con ojos, este robot está totalmente preparado para realizar aquellas tareas monótonas de un puesto de trabajo e, incluso, aquellas que se puedan considerar peligrosas.

Entre otras funciones, Sawyer puede tanto mover objetos de peso de un lugar a otro como procesar metal, envolver paquetes, ensamblar maquinaria, soldar y otras tareas tediosas para un ser humano.

Aprende tareas

Una de las principales características de Sawyer es que posee la capacidad para aprender nuevas tareas que no tiene realmente programadas. Basta con que mueva su brazo robótico para memorizarlas, como es el que caso de cortar el pelo. 

Sawyer no puede cortar el pelo a la perfección ni a la precisión con la que podría un peluquero, pero lo cierto es que supone un gran paso hacia un futuro en el que estas máquinas puedan aprender por sí solas determinadas funciones y profesiones.

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