Pavel Durov, CEO de Telegram, lleva en libertad seis días, tras haber pagado una fianza de cinco millones de euros. La justicia francesa le ha imputado 12 cargos, entre ellos, haberse negado a comunicar información y ser cómplice en la posesión de imágenes pornográficas de menores. Mientras este caso se resuelve, la aplicación de mensajería que fundó, Telegram, está siendo investigada en otros países, desde la Unión Europea, hasta Corea del Sur. En este último país, Telegram está colaborando con las autoridades en la eliminación de contenidos ilegales.
Tras la detención de Durov en Francia, varios medios coreanos encontraron imágenes y vídeos sexuales de mujeres surcoreanas en canales de Telegram. La mayoría de los casos son de estudiantes, mujeres jóvenes, que ven expuesta en internet su imagen falseada mediante deepfakes y con una motivación sexual. Información que indignó al país y propició una investigación policial.
Según informa The Register, la Comisión de Normas de Comunicaciones informó este martes que la plataforma de Pavel Durov se había disculpado por la presencia del contenido. "Todos los vídeos de delitos sexuales digitales señalados por la Comisión de Normas de Comunicaciones de Corea han sido eliminados", se puede leer en el comunicado.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, pidió la semana pasada que los delitos sexuales digitales se investiguen de forma exhaustiva, sin hacer mención a la empresa de Durov ni ninguna otra plataforma de forma explícita. Según la policía surcoreana, los delitos sexuales falsos en internet han aumentado, y en los primeros siete meses del 2024 se denunciaron 297 casos. Esto supone un aumento de casi el doble de la cifra de 2021, cuando se empezaron a recopilar los datos.
En concreto, Telegram ha eliminado 25 vídeos y la Comisión ha expresado su esperanza de que el incidente fuera un primer paso hacia una relación productiva, que incluya que Telegram le proporcione una línea directa mediante correo electrónico para facilitar solicitudes rápidas de eliminación. Sin embargo, Telegram no ha emitido ninguna respuesta pública y global que sugiera que la plataforma responder de forma similar en otros países.
Bruselas también inició una investigación para determinar si la aplicación de mensajería ha violado las normas comunitarias. Días antes, tras la detención de Durov, Telegram emitió un comunicado recordando que "cumple con las leyes de la UE, incluida la Ley de Servicios Digitales: su moderación está dentro de los estándares de la industria y mejora constantemente".
Por su funcionamiento, Telegram se ha convertido desde su nacimiento en 2013 en una plataforma de comunicación digital que acoge a numerosos grupos de activistas y defensores de derechos humanos. Sin embargo, otro tipo de actividades también han encontrado cabida en sus canales de comunicación masivos y su sistema de cifrado, actividades delictivas. En España, en el mes de abril, estuvo cerca de ser bloqueada por orden judicial ante su negativa a colaborar en una demanda por vulneración de la propiedad intelectual.