Adiós a los radiadores: la bomba de calor que reduce la factura energética en un 87% gracias una optimización sin rival
- La startup inglesa Wondrwall acaba de lanzar al mercado el que considera "el sistema de bomba de calor más inteligente del mundo".
- Más información: La ingeniosa bomba de calor que calienta la casa gastando el mínimo: bate el récord de eficiencia
Las primeras masas de frío ártico y sus consecuentes nevadas ya están llegando a España, lo que conlleva un aumento considerable en el gasto en las facturas del gas y la luz. Los sistemas de calefacción más habituales no son tan eficientes como la nueva generación de bombas de calor, que poco a poco van llegando al mercado con propuestas cada vez más baratas, compactas y fáciles de instalar. El elevado coste inicial, su incompatibilidad con algunos hogares y la necesidad de instalar equipos voluminosos va quedando atrás con sistemas cada vez más pequeños y asequibles.
Uno de los lanzamientos más relevantes en el sector viene de Manchester (Inglaterra) y la startup Wondrwall. Hace sólo unas semanas, esta compañía lanzó el que considera "el sistema de bomba de calor más inteligente del mundo". Entre sus ventajas frente a los métodos convencionales y otras bombas de calor, es capaz de reducir en más de un 80% la factura energética. El secreto está en la inteligencia artificial, capaz de "aprender cómo se utiliza el hogar y controlar automáticamente las funciones para optimizar el confort y la eficiencia energética", según su página web.
Todo forma parte de un ecosistema aún más ambicioso, el Sistema de Gestión Energética del Hogar (HEMS, por sus siglas en inglés), que incluye placas solares, baterías y unos interruptores de la luz que funcionan como centros de control del hogar conectado. Aún así, los distintos productos se pueden instalar de forma independiente, por lo que la bomba de calor que minimiza el consumo de energía sigue siendo una opción muy a tener en cuenta para reducir el consumo energético del hogar y los gases de efecto invernadero.
Cómo funciona
El sistema HEMS de Wondrwall, que debe su nombre a la mítica canción de Oasis, lo conforman múltiples elementos, especialmente pensados para obra nueva, de los que se pueden aprovechar tanto los propietarios de las viviendas como los constructores. Antes de la bomba de calor con IA, esta empresa de Manchester lanzó al mercado soluciones como la calefacción por infrarrojos o el suelo radiante eléctrico, diseñados para ofrecer mayor confort y reducir el gasto.
En 2022, la startup se asoció con la japonesa Daikin para participar en el programa Heat Pump Ready, iniciativa del gobierno británico para "apoyar el desarrollo y despliegue de las soluciones necesarias para acelerar la instalación rentable y de alta densidad de bombas de calor domésticas". Tras trabajar mano a mano con el objetivo de superar todo tipo de obstáculos técnicos y reducir el coste de funcionamiento de las bombas de calor, finalmente, la empresa británica acaba de lanzar su propuesta en solitario.
La clave está en los interruptores inteligentes de Wondrwall, que controlan hasta 3 circuitos de iluminación, pero además incorporan 13 sensores para detectar el movimiento, la luz, la temperatura, el tacto y el sonido. Una vez instalado en toda la casa, este sistema domótico con todo integrado es capaz de analizar cada día cerca de 20.000 datos procedentes del hogar.
Para ello combina información recopilada por los propios interruptores con fuentes de datos externas, como el coste de las tarifas energéticas y las previsiones meteorológicas. Así consigue "optimizar el rendimiento en función de la ocupación y las pérdidas de calor de la vivienda", siempre con la seguridad como prioridad, encriptando los datos de forma segura y con el exclusivo fin de mejorar el rendimiento energético del hogar.
Los controles dinámicos y la inteligencia artificial permiten así minimizar el gasto, desplazando la demanda a fuentes de energía más baratas, como la energía solar o la electricidad en horas valle. En caso de que haya energía sobrante, se exporta en las horas punta, lo que supone un ahorro aún mayor para el usuario.
"Por sí sola, esta bomba de calor ofrece múltiples ventajas a propietarios y constructores. Desde su funcionamiento silencioso, hasta su tecnología de arranque/parada adaptativa, esperamos que sea un éxito entre aquellos que buscan lograr ahorros de costes y eficiencias energéticas que superen el rendimiento actual", aseguró Marck Lufkin, director de producto de Wondrwall, en un comunicado de prensa.
Para reforzar esa integración del sistema en la domótica de la vivienda, los interruptores vienen con Alexa integrado, para poder utilizar el control por voz estés donde estés. Además, también se integra a la perfección con los altavoces SONOS, a los que detecta de forma automática facilitando el control de cada elemento sin necesidad de utilizar otras aplicaciones.
Plataforma abierta
En una decisión poco habitual, junto con el lanzamiento de su nueva bomba de calor, los responsables de la compañía mancuniana han abierto la plataforma HEMS a otros fabricantes. "Wondrwall se ha comprometido a desarrollar los productos y servicios necesarios para ampliar el despliegue de la tecnología de carbono neto cero", señaló Daniel Burton, CEO de la compañía. "Por primera vez, estamos abriendo el sistema Wondrwall a todos los fabricantes de bombas de calor, permitiendo que todos se beneficien del potencial de ahorro energético que ofrece nuestra tecnología".
El objetivo es que todas las viviendas de nueva construcción incluyan esta revolucionaria solución para la gestión energética, que también se puede complementar con otros productos y sistemas de Wonderwall para lograr el mayor ahorro posible. El más exitoso es el conocido como Energy Services Contract (ESC), que permite a los constructores y propietarios de viviendas instalar energía solar fotovoltaica, almacenamiento en batería y puntos de carga de vehículos eléctricos sin coste inicial, con un pago fijo mensual, sin sorpresas.
También destacan sus paneles de calefacción por infrarrojos, que se suelen instalar en el techo para mejorar hasta un 30% su eficiencia energética. En vez del aire, el calor radiante calienta los objetos y a las personas, además de integrarse a la perfección con los controles inteligentes de los interruptores, con ajustes para cada habitación en función de su ocupación. Además, no necesitan mantenimiento y su vida útil es superior a las 100.000 horas.
Los ensayos llevados a cabo por los técnicos de la empresa en colaboración con el Departamento de Seguridad Energética y Red Cero (DESNZ) del Reino Unido son bastante concluyentes. En una vivienda media de nueva construcción con el sistema Wondrwall, la factura energética se redujo en un 87% en comparación con la misma vivienda en la que sólo se utiliza la bomba de calor. Todo un avance a tener muy en cuenta y que, esperemos, podría llegar muy pronto a España.