Se han publicado muchas opiniones sobre por qué el PP puede pactar con Vox. Pero no recuerdo alguna que diga si Vox puede pactar con el PP. Se da por supuesto que sí, y la verdad es que no estoy de acuerdo.
Vox no puede pactar con el PP. Y no puede porque lo dice Vox.
Lo dice en público. Lo dicen sus dirigentes: el PP es como el PSOE, y eso hace que sea aún peor. Porque no sólo hace el mal que imponen los socialistas, sino que además lo blanquea. El PSOE desbroza el camino hacia la revolución, sostienen, y el PP lo asfalta.
Santiago Abascal dijo en Murcia que "Frente a uno de los peores gobiernos de la historia de España, está la nada" del PP. El PP es la nada, el camino de rosas para que avancen los claveles.
Jorge Buxadé ha insistido en que Vox es la "única alternativa en España para construir una alternativa real". Porque no hay más alternativa que Vox. Todos los demás son iguales, peores o alternativos.
Iván Espinosa aseguró que "a lo que más se parece un votante del Partido Popular es a un votante de Vox, y a lo que más se parece un dirigente del PP es a un dirigente del PSOE". El PP es la quinta columna del PSOE, y el votante del PP una buena persona traicionada que todavía no sabe que tendría que votar a Vox.
Javier Ortega Smith dijo que "frente a las imposiciones ideológicas de unos, y cobardes sumisiones de otros, sólo queda Vox". Unos imponen, pero son peores los cobardes y sumisos del PP.
En resumen, y si hemos entendido bien, sólo queda Vox. El resto son el Frente Popular, terroristas, nacionalistas y, los peores de todos, los que callan y consienten. Los que llevan cuarenta años conniviendo con la demolición de la patria.
Lo dijo Abascal, el Partido Popular es un "simple relevo al PSOE". Y Espinosa de los Monteros: "Sois iguales al PSOE". Y Vox en un manifiesto de 13 de abril de 2023: "Da igual que miremos para el PSOE o el Partido Popular, ambos están marcados a fuego por la corrupción, golferías, cajas y sobres B y muchos Tito's Berni's por doquier cual el inspector Torrente en su salsa".
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Respecto a ETA y el aborto, puntos irrenunciables de la formación verde, también son muy claros: sólo queda Vox.
Santiago Abascal fue claro en campaña sobre ETA: "Ellos nunca están. Salvo en los Goya. Allí sí están, aunque le dediquen un premio al proetarra Fermín Muguruza". Javier Ortega había asegurado antes que hay un "consenso indigno" entre PP y PSOE para "blanquear" a ETA.
Sobre el aborto y la vida, otro de los asuntos que preocupa a parte del electorado de Vox, dicen que se han quedado solos. Nadie más defiende la vida. Lo decía Espinosa de los Monteros. "Se están aprobando leyes de la muerte" (…) y "estamos un poco tristes de quedarnos solos, una vez más sólo queda Vox en la defensa de ciertas causas que lamentablemente otros partidos han ido abandonando". Lourdes Méndez insistió en que, mientras Vox "defiende la vida", el PP "elige la muerte".
De todo esto debería deducirse una única conclusión. Si el PP es el partido que elige la muerte, el que blanquea a ETA y el que hace bueno al PSOE, entonces pactar con el PP es peor que pactar con Bildu.
Pero como parece que los principios se pueden dejar en suspenso hasta que se consiga el poder, y que Vox tiene la ductilidad de pactar con el PP, o con cualquiera que le lleve al gobierno, lo que podría hacer es pescar donde hay más probabilidad de éxito. Podría situarse a la izquierda del PP y convertirse en el nuevo partido bisagra. El espacio de Ciudadanos es todo suyo.