Las ansias por recuperar la normalidad pueden a algunos. En medio del entusiasmo de volver a salir a la calle y tomar aire después de llevar mes y medio encerrados en casa, hay quien no parece recordar que todavía no se ha levantado el confinamiento y que España continúa en estado de alarma por el coronavirus.

Hoy era el primer día para que los padres saliesen con sus hijos, de hasta 13 años, a dar un paseo cerca de sus domicilios y evitando aglomeraciones. El Gobierno permitía la salida de lo más pequeños de la casa pero siempre guardando las distancias para evitar contagios. Distancias que, en base a las fotografías que circulan por redes sociales, no todos los padres han cumplido.

La propia alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, se dirigía en la jornada de ayer a los más pequeños para pedirles responsabilidad en sus salidas a la calle. Sin embargo, estas recomendaciones cayeron en saco roto para algunos.

De hecho, para evitar imágenes como las que recogemos abajo en esta noticia, la policía ha intensificado en el día de hoy sus labores de vigilancia para garantizar que padres y niños cumplían con las restricciones fijadas por el Gobierno. Las zonas del Paseo Marítimo y el Paseo de los Puentes fueron dos de los puntos vigilados por los cuerpos de seguridad para comprobar que padres y niños guardaban las distancias.

Aunque el cumplimiento de las normas ha sido la tónica general, ha habido notables muestras de desobediencia por las calles coruñesas. Una de las más comentadas en Twitter es la de un grupo de padres y niños que, obviando la distancias, charlan tranquilamente en un corrillo.

Hubo parques que también se han convertido en hervideros de padres que, aprovechando que no llovía, se reunían para charlar después de más de un mes sin coincidir en el parque. Y por supuesto, otra vez, todos juntos, sin mantener más de un metro de distancia.