SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) –

El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de A Coruña detectó este viernes en Oza-Cesuras (A Coruña) a un conductor de 65 años que circulaba con el carné retirado por pérdida de puntos. A pesar de que el vehículo fue inmovilizado, tres horas más tarde los agentes lo volvieron a interceptar al volante. Según el Instituto Armado, los hechos ocurrieron durante un dispositivo de vigilancia de seguridad instalado en la carretera DP-0106, entre San Vicente de Vigo y Oza dos Ríos, a su paso por Oza-Cesuras.

En esta vía agentes interceptaron al sexagenario conduciendo un turismo sin el permiso en vigor porque ya había agotado sus puntos y el conductor era reincidente, puesto que cuenta con tres investigaciones previas por los mismos hechos en menos de un año. Tras detectarlo, los agentes procedieron a investigarlo por un delito contra la seguridad vial e inmovilizaron su coche, que quedó precintado en el lugar.

Sin embargo, tres horas después los mismos agentes se dirigían al lugar para verificar que el vehículo continuaba inmovilizado pero se cruzaron con el conductor al volante del mismo turismo. Tras darle de nuevo el alto, la Guardia Civil volvió a abrir diligencias contra el sexagenario por conducción ilegal, aunque esta vez acumulaba ya cuatro antecedentes previos. Todas las diligencias fueron remitidas al Juzgado de Instrucción Número 3 de Betanzos y según las autoridades, el hombre se puede enfrentar por estos hechos a penas de tres a seis meses de cárcel, a una multa de 12 a 24 meses o a trabajos comunitarios de 31 a 90 días.

Conducción bajo influencia del alcohol

Por otra parte, el Subsector de Tráfico de A Coruña realizó este viernes dos investigaciones penales contra dos conductores en Coristanco y Curtis por rebasar la tasa de alcohol permitida en sangre. La primera de las investigaciones se abrió en un punto de verificación en la DP-2904, entre Coristanco y Santa Comba. Cuando fue interceptado, según la Guardia Civil, el conductor mostraba "claros síntomas de embriaguez".

Tras el control de alcoholemia, las tasas resultaron ser de 0,90 y 0,94 miligramos por litro en las dos pruebas realizadas, es decir, más del triple del máximo permitido. Además, al hombre le constaban tres antecedentes por el mismo delito, pues ya había sido condenado penalmente y había realizado cursos de reeducación vial. A su vez, el Equipo de Atestados le abrió diligencias por un delito de conducción bajo influencia del alcohol.

La segunda investigación se detectó a raíz de un siniestro ocurrido en la travesía de la localidad de Curtis cuando el conductor de un cuadriciclo ligero sufrió una salida de vía por el margen derecho de la carretera y colisionó con otros dos coches aparcados. A su llegada, los guardias civiles le realizaron el test de alcoholemia, en el que arrojó tasas de 0,72 y 0,63 miligramos por litro en aire respirado y los agentes dieron cuenta de los hechos al Juzgado de Instrucción Número 2 de Betanzos.