Las playas de A Coruña, así como las del Concello de Oleiros, son aptas para el baño y no existe peligro debido a la Escherichia coli (E-coli) o los enterococos intestinales. La Xunta detectó cantidades elevadas de estas bacterias en un análisis rutinario de las aguas de los arenales coruñeses, tras lo que recomendó a los ayuntamientos en los que se encuentran que colocasen carteles informativos sobre lo ocurrido. Sin embargo, poco después se informó de que el baño volvía a ser seguro.

La Consellería de Sanidade realiza analíticas regulares cada dos semanas durante los meses del verano para controlar el estado de las aguas. En el control realizado el pasado 12 de agosto, se detectaron cantidades elevadas de E-coli en las playas de As Lapas, Orzán, Oza, Matadero y Riazor, así como en otras de la provincia coruñesa como las de de Naval, Mera, Bastiagueiro, Santa Cristina, Santa Cruz y Estorde (Cee). Este incremento en la bacteria se debió a las lluvias torrenciales de esos días, que arrastraron la contaminación.

Apenas unos días después, el 16 de agosto, la presencia de E-coli y entorococos intestinales había vuelto a niveles normales en todos los arenales y los bañistas no corrían ningún tipo de riesgo. Un retraso en la transmisión de la información provocó alguna confusión referida a la idoneidad de bañarse en las playas de A Coruña, aunque ahora es completamente seguro hacerlo.