Esta madrugada del viernes varias calles del centro de A Coruña se llenaron de personas sin mascarilla, que no respetaron las distancias de seguridad y que consumían bebidas fuera de los establecimientos de hostelería. Así lo aseguran varios vecinos y testigos que relatan a Quincemil lo ocurrido.

La zona más concurridas fueron la travesía de la Cormelana y la calle Orzán. Varios locales registraban aforo completo y muchas personas decidieron quedarse en la calle. Esto provocó imágenes como las que se pueden ver en este artículo.

Señalan testigos que por la zona pasó un coche patrulla de la policía local, que tuvo ciertas dificultades para atravesar la vía entre la multitud. Sin embargo, no llegaron a bajarse los agentes. Denuncian el alto ruido que se registró hasta pasadas las dos de la madrugada.

Los establecimientos de hostelería cerraron sus puertas a la una, tal y como marcan las directrices de la Xunta. Sin embargo, la multitud tardó más de una hora en dispersarse. Cabe destacar que esta madrugada fue la primera en la que los negocios de ocio nocturno podía volver a abrir el interior de sus locales en la ciudad, que ha entrado en nivel medio de restricciones.

Los vecinos denuncian también que muchas de estas personas que estaban en el exterior se encontraban haciendo botellón. Esta zona es una de las que registra más actividad nocturna en la ciudad. En el pasado, el Concello actuó con mano dura para evitar los botellones en la calle Vista, muy próxima a este punto.