La populosa Calle Real de A Coruña, se mueve este mes de agosto al ritmo de Bumblebee, un impresionante Transformer amarillo de casi dos metros de altura que capta la atención de locales y turistas desde hace varios días tras su llegada a la ciudad. Bajo el disfraz, minuciosamente elaborado durante más de tres meses utilizando elementos como piezas de vehículos, se oculta Mario, un argentino de 45 años residente en Barcelona que recorre España con su original performance.

Antes de la llegada de la pandemia en marzo de 2020, Mario tenía un empleo que desgraciadamente perdió durante los primeros meses de crisis sanitaria, pero lejos de amedrentarse buscó alternativas para subsistir. Empleó varios meses de la cuarentena en elaborar el traje de Bumblebee, de la saga Transformer, cuya sexta entrega está dedicada íntegramente a este personaje.

Una historia atractiva en la que se cuenta que Bumblebee es un explorador "autobot" que encuentra refugio en un depósito de chatarra californiano y que el avance de la trama muestra que realmente se trata de un ser del espacio exterior que muchas décadas antes recibió el encargo de proteger a la humanidad de una invasión de los malvados Decepticons.

Espectáculo que traspasa fronteras

Bajo el nombre de Mario transformers (@mariorobot.6 en instagram), el argentino recorre con su show las principales ciudades de toda España ganándose la vida y conquistando al público que se detiene junto a él. Observan sobre todo sus movimientos y su impresionante traje elaborado con todo lujo de detalles y digno de ser usado en las mejores producciones cinematográficas de superhéroes.

Aún le quedan unos días en A Coruña, pero en sus redes sociales muestra imágenes y vídeos de otros lugares que ha visitado recientemente como Bilbao, Madrid, San Sebastián, Valencia, Mallorca, Tarragona, Manresa, Mataró, Sabadell y, por supuesto, Barcelona (ciudad donde reside y echó raíces).

Asimismo, Mario asegura que hace una década ya estuvo en A Coruña con otro de sus shows y un personaje diferente, otra ocasión en la que no pasó desapercibido porque admite que varios medios locales se hicieron eco de su presencia.