Vecinos de la Fábrica de Tabacos de A Coruña protestan por el ruido de la pista de hielo

Todo comenzó la noche del pasado jueves, cuando se colocó un grupo electrógeno para suministrar energía a la pista de hielo que se está instalando en la Plaza Fábrica de Tabacos de A Coruña. "A partir de ese momento solo se apaga una hora por la mañana, luego vuelven a encenderlo", explica a Quincemil Carlos Sánchez, vecino del barrio que lleva varios días sin poder dormir.

El edificio en el que vive este vecino, está al lado de la Casa del Mar y a tan solo unos metros del grupo electrógeno. "Si pones la mano en el cristal de la ventana de casa vibra", cuenta Carlos, que dice que lleva "tres días sin pegar ojo" y que incluso se planteó ir a dormir a un hotel.

Fuente: CEDIDA

Otra vecina, Carmen Fafián, relata que el sábado por la noche se inundó el portal del edificio, al estar los operarios de la pista utilizando una manguera para la construcción de la pista. "Nos dificultó el acceso, hay poca iluminación y vamos con niños pequeños", cuenta la afectada.

Las ventanas de la casa de Carme no dan hacia la pista, por ello no nota tanto el ruido como su vecino, pero sí que destaca el fuerte ruido que se escucha al bajar a la calle. Teme que cuando la pista esté acabada el ruido vaya en aumento y suponga un problema. "Que hagan la pista en Marineda es diferente, porque no hay edificios alrededor, aquí es una zona de viviendas".

Por su parte, Carlos se ha puesto en contacto con la Policía y el Ayuntamiento para encontrar una solución. "La Policía está atada de pies y manos, han venido varias veces y han hecho informe del ruido que produce a las viviendas".

El problema para este vecino se produce porque el Ayuntamiento dio permiso para colocar el grupo electrógeno. Durante el día de hoy se ha puesto en contacto con la administración local, que por el momento desconoce "quién dio la autorización". Al coincidir esta problemática con el puente de la Constitución, "hasta el jueves no podrán ver que solución tomar", explica Carlos a Quincemil.