La plaza de María Pita de A Coruña acoge una Vigilia por la Paz y el fin de la guerra

Una decena de personas se concentraron esta tarde a partir de las 19:30 horas en la plaza de María Pita de A Coruña para pedir el fin de la guerra en Ucrania. La Vigilia por la Paz se celebró en medio de una fina lluvia que dificultó el encendido de las velas con el símbolo de la paz pero no impidió que los asistentes clamasen por el fin del conflicto bélico que comenzó hace dos semanas.

El grupo de voluntarios de Greenpeace en Galicia organizó el evento para mostrar su apoyo a los millones de ciudadanos que sufren las guerras, no solo en Ucrania sino en otros países del mundo. Madrid, Murcia, Granada, Tarragona y Girona son los otros emplazamientos en los que se celebró la Vigilia por la Paz esta tarde.

Así, un símbolo de la paz dibujado con velas permanecía al lado de la estatua de María Pita y frente al edificio del consistorio mientras los organizadores leían un manifiesto en el que recordaban que hoy se cumplen dos semanas desde el inicio de la guerra en Ucrania. Los asistentes a la concentración mostraron su solidaridad con las víctimas del conflicto, en especial con la población civil que "ya sufre las consecuencias de la escalada" y que es "la principal damnificada" de la dinámica belicista.

No caer "en la trampa" de una guerra nuclear

Greenpeace condenó las amenazas de Putin de usar armas nucleares y aseguró que la comunidad internacional no debe caer "en la trampa" de una guerra nuclear. "Queremos mostrar nuestra profunda preocupación por la posible destrucción y contaminación que supone la ocupación militar rusa de Chernóbil y el peligro que suponen las operaciones militares en plantas de energía nucleares y otras instalaciones nucleares en Ucrania", leyeron en un manifiesto dos de las asistentes a la Vigilia, que generó los aplausos de los asistentes.

Los asistentes a la Vigilia por la Paz encienden las velas en María Pita.

La entidad lleva mucho tiempo haciendo campaña contra el gas y otros combustibles fósiles que están en "la raíz" del cambio climático, la contaminación tóxica y los conflictos. Greenpeace considera "urgente" romper con la dependencia de este tipo de combustibles y pide a la comunidad internacional que se tome en serio construir un servicio de energía renovable seguro para todas las personas.

"Pedimos el cese de las armas, el cese de la guerra, y que se vayan las tropas de Putin de vuelta para Rusia. Queremos lanzarles a los Gobiernos y a la OTAN el mensaje de que no podemos parar la guerra con más guerra. Las armas no fueron, ni son ni serán el camino para la paz" concluye la portavoz de Greenpeace en Galicia, Sara Martínez.