La huelga del transporte han llevado a miles de camiones a las ciudades de A Coruña, Santiago de Compostela y Vigo, como puntos centrales de una protesta que reúne fundamentalmente a trabajadores autónomos o pequeñas empresas en un paro al que se han ido sumando diferentes colectivos. En A Coruña, se llegaron a contabilizar cinco kilómetros de protesta del sector del transporte que entraron por la avenida de Alfonso Molina, siguiendo por Matogrande para ser desviados al puerto.

Los transportistas partieron a las 11:00 y recibieron aplausos de viandantes a su paso por las calles coruñesas, a las cuales accedieron desde la zona de Culleredo por el puente de O Burgo. Uno de los huelguistas que participaron en la movilización de este lunes, Rono, expresó en alusión a la Ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que "son un colectivo grande" y que aunque ella diga que son "un colectivo minoritario" dejó claro que "saben hacer ruido", como ha sucedido en la ciudad herculina, Santiago o Vigo esta mañana.

Del puerto coruñés al inicio de la marcha salieron en torno a 220 camiones, según los participantes, una caravana que se fue ampliando con otros de empresas de Mesía, Toques, Arteixo, Ordes, Mazaricos, Oroso o Sobrado dos Monxes, además de grúas, miembros de cofradías de pescadores o furgonetas de particulares del sector. La idea inicial era que la caravana hubiera llegado a las 12:00 al puerto coruñés, pero debido a la afluencia a la marcha se retrasó la llegada y los participantes finalmente no fueron andando hasta la Delegación del Gobierno como inicialmente estaba previsto.

"No esperábamos tanta afluencia", dijeron algunos de los organizadores, que se mostraron orgullosos de la respuesta al seguimiento. Se organizaron a través de grupos de mensajería y por el boca a boca, además de que cientos de vehículos de transporte, muchos de ellos de ganado, se dieron cita en dos puntos de la capital gallega, en el mercado de ganado de Amio y en el polígono de Costa Vella y del Tambre, llegando hasta la maderera Finsa, afectada por las protestas.

Camiones en A Coruña. Foto: Quincemil

"Pedimos que nos entiendan, nos hemos visto obligados"

Pepe y Rono, transportistas autónomos en A Coruña. Quincemil

Los transportistas autónomos de A Coruña protestan desde hace una semana en una carpa montada a las afueras del Puerto de A Coruña. Allí nos encontramos con Pepe y Rono, dos trabajadores que permanecen de guardia mientras sus compañeros realizan una marcha lenta por A Coruña.

Esta mañana recibían la visita y el apoyo de las cofradías de la provincia, con pescadores de Lorbé, Corme, Laxe, Malpica o Caión, que se unen a las protestas después del amarre de la flota. "Los pescadores están en la misma situación que nosotros por el tema de combustible. Los de altura están casi todos amarrados, quizás salga alguno pero están parados", señala Rono.

El precio del gasóleo, ese es el principal problema que ha llevado a los transportistas a esta situación: "Pedimos un precio estable, que no suba, de la manera en la que está funcionando no conseguimos repercutir esta subida al cliente. Podemos contratar un precio para dentro de dos semanas, pero en esas dos semanas igual sube 15 céntimos", declaran.

Esta no es la única subida de precios que experimentan, ya que también ahora tienen que pagar más por las ruedas o por las piezas de repuesto. "Es la pescadilla que se muerde la cola y nos hemos visto obligados a parar, porque ganamos más dinero parando el camión que trabajando con él. Nosotros somos autónomos, los que estamos al pie del cañón aguantando el tirón, no las agencias que se van a reunir ahora con el Gobierno", apuntan.