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Después de 700 largos días de convivencia con la mascarilla a causa de la pandemia del coronavirus, este miércoles 20 de abril el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado la modificación del decreto por el que se pone fin a la obligatoriedad del uso de las mascarillas en interiores. Este cambio ha sido recibido en A Coruña de manera tímida en general, dado que en la mayoría de locales y tiendas del centro de la ciudad son mayoría las personas que la mantienen puesta tanto para entrar en los sitios como dentro de ellos mientras no consumen.

En la calle, a pesar de que ya no es obligatorio el uso de esta medida de protección, en A Coruña sigue habiendo ciudadanos que optan por llevarla igualmente, sobre todo de edades avanzadas. En centros comerciales como el de Cuatro Caminos o en El Corte Inglés, esta mañana pudieron verse a algunos compradores e incluso dependientes y personal de seguridad sin mascarilla, una imagen habitual hace un par de años y que ahora se contempla como una novedad dado que esta situación no era posible desde inicios del 2020.

En locales de la calle Real, calle de la Franja, de la Galera y alrededores, eran numerosos los ciudadanos que incluso preguntaban dubitativos en las puertas de los establecimientos sobre el uso de mascarilla o no y al ser informados por los dueños de la norma que ha entrado en vigor este miércoles cada uno ha decidido la opción más conveniente.

Excepciones

Asimismo, hay algunas excepciones a la norma aprobada en el último Consejo de Ministros y las personas de seis años en adelante todavía quedan obligadas al uso de mascarillas en varios supuestos. Los usuarios de los medios de transporte aéreo, por ferrocarril o por cable y en los autobuses, así como en los transportes públicos de viajeros deberán continuar con esta medida de protección. Serán obligatorias también en los espacios cerrados de buques y embarcaciones en los que no sea posible mantener la distancia de 1,5 metros, salvo en los camarotes, cuando sean compartidos por núcleos de convivientes.

En los centros sociosanitarios, los trabajadores y los visitantes tendrán que llevar mascarilla cuando estén en zonas compartidas. En el entorno laboral, con carácter general, no resultará preceptivo el uso de mascarillas, recoge el BOE.