Hace 15 años, un taxista preguntaba al por entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el precio de un café después de denunciar la inflación en los precios que sufrían en su día a día los ciudadanos de a pie. Por aquel entonces, los 80 céntimos que señalaba el presidente estaban lejos de la realidad, pero ahora en algunas cafeterías de A Coruña casi se duplica aquella cantidad y hay cafés a 1,50 euros.

El presidente de los hosteleros coruñeses, Héctor Cañete, explica a Quincemil el precio de la subida de este producto: "El café ha subido su precio para nosotros desde el mes de noviembre. Esto se produce por el aumento del coste del transporte mundial que se ha multiplicado en un 600%. En muchos locales se ha tenido que ajustar algo, unos cinco céntimos o como mucho diez".

El problema para la hostelería va más allá del café, ya que todos los productos y materias primas están viendo incrementados su valor. Cañete pone como ejemplo el día a día de cualquier ciudadano que ve un aumento de precios en su supermercado habitual, algo que se traslada a la hostelería que se ve afectada por la inflación.

La luz y el gas también se han incrementado y en la hostelería son dos piezas claves para negocios que pasan muchas horas abiertos y que utilizan hornos o freidoras: "Con la subida de las materias primas y los suministros habría que subir más los precios pero la hostelería se está conteniendo", apunta Cañete.

No perder dinero y no perder clientes

El hostelero considera "difícil" hacer una estimación de la subida porque cambia entre locales y productos, pero señala que "cada uno ajusta lo mínimo posible para no perder dinero ni clientes". Cañete pone un ejemplo: "Un compañero subió el menú del día 50 céntimos, 10 céntimos del primer plato, 10 del segundo, 10 del postre, 10 de la bebida y 10 del café. Al final estás asumiendo casi toda la subida que viene acumulada".

Por el momento la clientela está recibiendo bien estás subidas y entiende la situación según afirma el hostelero. Por otro lado, el sector muestra su preocupación ante las negociaciones de los convenios colectivos de los trabajadores, que buscan un aumento del 6-8%, algo que en esta situación provocaría que "la inflación se disparase", apunta Cañete.

¿Se van a cobrar los pinchos?

En algunos locales es una práctica habitual poner una tapa o un pincho gratuito al cliente con su consumición. En los últimos días se viene rumoreando que estos se iban a empezar a cobrar, algo que el presidente de los hosteleros califica de "polémica ficticia".

"Todo el mundo busca ajustar y dar el mejor servicio a los clientes. Si antes dabas tortilla y no te cubre, ahora tendrás que poner unas lentejas. La situación se está complicando mucho, la inflación dicen que es del 10% en Galicia, pero en temas alimenticios yo creo que estamos en el doble", concluye Cañete.