El Concello de Betanzos (A Coruña) apostó el pasado fin de semana por la seguridad privada para evitar el botellón en la plaza Pepito Arriola. Los accesos a este espacio estuvieron vigilados durante la noche del sábado al domingo con el objetivo de prevenir que se produjesen incidentes como los de las últimas semanas, con gente consumiendo bebidas alcohólicas en la plaza.

La medida fue tomada después de mantener una reunión con la comunidad de propietarios para analizar la situación que viven los vecinos de este espacio próximo a la "zona de movida". "Se trata de una plaza de uso público en la que se vinieron repitiendo de forma sucesiva distintas actos vandálicos, incumpliendo la ordenanza de ruidos y limpieza", indica el ayuntamiento.

El concello indica en una nota que, ante la imposibilidad de que la Policía Local pudiese estar presente en la zona durante tiempo prolongado, al tener que atender otras incidencias del fin de semana, y la limitación de presencia de la Guardia Civil, decidió contratar seguridad privada. Esto permitió limitar los accesos a la plaza durante la noche del sábado en coordinación con los cuerpos y fuerzas de seguridad.

El Gobierno local lamenta que se tengan que tomar este tipo de medidas pero recuerda que es preciso respetar a las personas que viven en la zona. "Es imposible poder mantener efectivos de la policía local de forma permanente en la plaza, por lo que seguiremos esta colaboración para garantizar el descanso de los vecinos", asegura el ayuntamiento.