El Concello de Betanzos baraja levantar las restricciones del agua en casi todo el municipio la próxima semana. Las medidas entraron en vigor el pasado 22 de julio, después de que las analíticas detectasen de nuevo norovirus, que ya había obligado desde finales de mayo y durante un mes a limitar el consumo del agua en el ayuntamiento.

"As últimas analíticas apuntan a que os traballos de desinfección realizados pola empresa concesionaria están a dar os seus froitos e que durante a próxima semana podería cambiar a situación que temos", aseguró esta mañana la alcaldesa, María Barral. La regidora se reunió este jueves con los responsables técnicos de Saúde Pública, Augas de Galicia y Viaqua para valorar las últimas actuaciones e las analíticas que se hacen a diario.

A este respecto, la alcaldesa destacó el esfuerzo realizado desde Saúde Pública, la empresa concesionaria y el propio ayuntamiento con jornadas de "horas e horas de traballo" para lograr solucionar el problema. El norovirus está actualmente presente solo en el depósito de Xanrozo, según las últimas analíticas realizadas.

El ayuntamiento señala que está previsto tomar nuevas muestras de confirmación el lunes con el objetivo de que los resultados estén listos a mediados de semana. Las restricciones se levantarían el miércoles en caso de que sean satisfactorios en todos los sitios excepto en los núcleos que abastece el depósito de Xanrozo, que tendrían que esperar "uns días máis".

A Graña, Guiliade, Piadela, Viladesuso, Castro, Infesta, O Farragoto, Abelares y parte de A Condomiña son los lugares que continuarían viendo afectado su suministro del agua. Las restricciones, sin embargo, continúan por ahora vigentes en todo el municipio: no se puede ingerir el agua ni usarla para lavar los alimentos o la higiene bucodental.

El ayuntamiento y la empresa concesionaria mantendrán el servicio de abastecimiento hasta ese momento a través de las tres cisternas que tienen en el municipio y que reparten unos 15.000 litros de agua. Los mayores de 75 años, vecinos con problemas de movilidad y familias vulnerables reciben las garrafas directamente en sus domicilios.

Saúde Pública, por otro lado, señaló que en los últimos días no se ha producido ningún aumento de casos de gastroenteritis "por encima dos habituais", al contrario de lo que había sucedido en junio. El brote salió a la luz el 28 de mayo, cuando se conoció que había 30 usuarios de Pai Menni afectados y otra treintena de personas ajena a las instalaciones que también estaban enfermas.