Este lunes se produjo un atraco en la cafetería San Telmo del barrio de O Ventorrillo. Su propietario, José Manuel Otero, fue atacado por un joven con el que había tenido una rencilla el día anterior. El ladrón se llevó un botín de 550 euros y acabó provocando lesiones al hostelero de 65 años.

El atraco se empezó a fraguar el sábado, cuando el joven visitó la cafetería y tuvo una pelea con el hostelero por irse sin pagar un refresco y por intentar robar una botella de agua. "Me dijo que ya me pagaría, pero como estaba cansado, le dije que se fuera".

Tras descansar el domingo, José Manuel Otero volvió a abrir las puertas de su establecimiento el lunes, momento en el que se produjo el atraco. El ladrón estaba acompañado en aquel momento por una joven: "Una chica me tocó la verja y me pidió un vaso de agua, pero le dije que no".

Cuando el hostelero se disponía a salir del local, notó como el joven se abalanzaba sobre el para agarrarlo del cuello y practicarle una llave: "Me empujó para dentro, tengo ciática y no me pude defender. Me arrastró detrás de la barra". Allí cogió el dinero que José Manuel Otero llevaba encima, que era una cuantía de 550 euros.

El ladrón huyó del lugar y el hostelero permaneció tirado en el suelo durante unos minutos. "No conseguía respirar", relata José Manuel. Cuando consiguió levantarse salió fuera del local y pidió auxilio. Al cabo de unos minutos unas personas aparecieron para ayudarlo y llamaron a la Policía Local.

El hostelero tuvo que ir a un centro hospitalario, donde le diagnosticaron un esguince de tobillo, rodilla y cervicales. Más tarde presentó una denuncia en comisaría y algunos conocidos le señalaron que vieron al joven en una zona de trapicheo cercana.