• ¿Por qué hay tantas palmeras en A Coruña? Esta es la explicación

El picudo rojo se ha cobrado otra víctima en A Coruña y este miércoles se ha talado una de las palmeras del paseo marítimo, a la altura de Riazor. Además, se han tenido que talar otros ejemplares en distintos puntos de la ciudad. Este insecto es una de las amenazas más grandes para las palmeras, ya que se come la planta por dentro, provocando su muerte.

Se trata de una de las grandes palmeras canarias que se encuentra en Riazor, detrás del Atlántico 57. Los trabajos se han realizado esta mañana y el Concello confirma que la razón ha sido el picudo rojo.

Por fortuna, las otras cinco palmeras que se encuentran al lado de esta son de otra especie, las conocidas como "palmitos", que no se ven afectadas por el picudo, por lo que "no es necesario actuar sobre ellas", ha asegurado el consistorio.

Distinta suerte han corrido otras palmeras canarias de la ciudad esta mañana. También se han tenido que talar ejemplares en la avenida del Metrosidero y en la carretera Os Fortes, junto a la sede de Tranvías.

La amenaza del picudo

El picudo rojo es "un escarabajo tropical que llegó a Italia y de ahí pasó a otros países europeos", contaba Javier Cremades Ugarte, catedrático de Botánica de la Universidade da Coruña a Quincemil. "Las palmeras tienen un penacho del que salen las hojas, el picudo pone huevos ahí y las larvas se comen la palmera por dentro", detallaba.

Cuando el picudo "se hace con la palmera" se quedan "mustias", y una vez extendida la infección "es muy difícil de tratar", aseguraba. Es por eso que el destino de las palmeras afectadas por esta infección suele ser. De hecho, en A Coruña este escarabajo ha terminado con más de 19 palmeras que han acabado siendo taladas en zonas como la Cidade Vella, Ronda de Nelle, Barrio de las Flores, Elviña, Ventorillo o A Grela.

Pero este no es la única amenaza para las palmeras. Hace unas semanas el Concello tuvo que podar otra situada delante del edificio de Aduanas, en avenida do Porto, que estaba afectada por un hongo y suponía un peligro para los viandantes.

Ese mismo día fue necesario cortar la calzada en Calvo Sotelo (en el acceso desde la avenida de la Habana) por los trabajos que se tuvieron que llevar a cabo el colegio Compañía de María para talar una de sus palmeras.