La procesionaria sigue siendo un problema en el Parque de Santa Margarita de A Coruña. La "visita" de esta oruga es habitual en el inicio de nuevos años, como ya ocurrió en el arranque de 2022 y 2021, por lo que es preciso aumentar la precaución y evitar tocarla.
El ayuntamiento tiene conocimiento de esta situación y ya en diciembre repuso y aumentó las trampas, trabajos con los que continúa actualmente. Los operarios municipales, además, acuden a diario a retirar los ejemplares y a situar las trampas donde sea preciso para atajar el problema.
Estos animales están en los pinos y bajan en los meses cercanos a la primavera, aunque en los últimos años es habitual verlas también en invierno. Las orugas forman una hilera de gusanos, similar a un procesión, razón por lo que reciben su nombre.
La procesionaria tiene unos pequeños pelos que pueden causar urticaria e incluso reacciones alérgicas, por lo que es fundamental no tocarla o acercase a ella. Una recomendación que no solo va dirigida a las personas, sino que se extiende a los perros y otros animales que frecuentan la zona.