Decenas de personas se han concentrado este domingo en el Obelisco de A Coruña para pedir justicia por Yoel Quispe, el joven que murió apuñalado la pasada Nochebuena; y por Henry Casimiro, el hombre que murió del disparo de un policía el día de Navidad.
La concentración ha comenzado haciendo dos minutos de silencio en memoria de los dos fallecidos. Bajo la fuerte lluvia familiares y amigos de las víctimas han reclamado una vez más que se haga "justicia" por estos "asesinatos racistas" porque "las vidas racializadas y las vidas negras importan". "Queremos salir a la calle sin miedo", han señalado.
"Recordamos el fatídico día 24, lo que ocurrió no fue una pelea, fue una persecución", han expresado. Y han denunciado "la violencia y la impunidad con la que somos maltratadas las personas racializadas".
Los sucesos
El joven Yoel Quispe, de 22 años, recibió una puñalada en el abdomen y otra en el corazón tras una pelea. Los hechos ocurrieron en la confluencia de Juan Flórez con la calle Sinfónica de Galicia y gente del entorno del chico apunta a que todo se derivó de una discusión previa en uno de los locales de Palexco, donde los implicados una vez fuera supuestamente siguieron al joven hasta el punto donde acabaron con su vida al encontrarle solo.
La Policía Nacional detuvo a tres personas por el crimen. Para uno de ellos decreto prisión sin fianza, mientras que los otros dos quedaron en libertad. Según informó la Delegación del Gobierno, la persona que permanece en prisión es un joven coruñés de 21 años.
En el caso de Henry Casimiro se trataba de un hombre de 34 años de edad que perdió la vida durante una actuación policial en el polígono de Agrela. El hombre falleció tras los disparos de los agentes, que aseguraron después que la actuación fue acorde al "protocolo".
Con este suceso quedó "patente el racismo institucional que existe en nuestra sociedad y la complicidad de los medios en construir una imagen que se aleja de la realidad", han señalado en la concentración.
"Asesinatos racistas"
El tejido antirracista gallego ha realizado además otra concentración en Santiago de Compostela este domingo. Considera que la muerte de Henry Casimiro un "asesinato racista" y que la actuación de la policía fue "absolutamente desproporcionada", al tratarse de "un hombre solo, sin otros civiles a los que dañar, en un polígono apartado, frente a una patrulla policial", recoge Europa Press.
Por ello denuncian que los acontecimientos "forman parte del entramado institucional y policial de supremacía blanca, racista y colonial, en el que las detenciones por perfilamiento racial son diarias", así como las medidas migratorias impuestas por la Unión Europea, pues piensan que "ser migrante y racializado en este territorio sigue estando criminalizado".