Este jueves, 7 de marzo, será un día señalado para el Concello de Cambre (A Coruña), debido a que su alcalde desde hace más de ocho años, Óscar García Patiño, ha anunciado su dimisión. Entró en el gobierno local en 2015 con UxC (Unión X Cambre) y ahora se marcha de su cargo debido al bloqueo municipal en el que está inmerso el concello, sobre el que se ha asegurado que "no se siente el culpable". A su vez, confirmó que no deja la política y que seguirá trabajando por su pueblo desde el partido que fundó hace 15 años.
"Hoy es un día difícil para mí, un día en el que voy a presentar mi dimisión como alcalde del Concello de Cambre, mi concello, el Ayuntamiento en el que nací y en el que voy a seguir viviendo", comenzó diciendo ante numerosos medios congregados. Sobre la decisión de dimitir, aseguró que "está pensada, meditada y estudiada" y razonó que la entiende como "la mejor que hay para que Cambre vuelva al buen camino". "Sé que no soy el culpable de esta situación pero creo sinceramente que mi marcha sí puede ser la solución y eso espero", ha deseado.
El bloqueo administrativo en el Consistorio, que ha conllevado problemas en el pago de facturas a distintas empresas, ha motivado la decisión de García Patiño. Precisamente, el último caso fue el de la suministradora de gasoil que suspendió su servicio por facturas pendientes por parte del Concello, que avanzó que evaluaba una solución y estudiaba usar vales de caja.
El origen del conflicto se sitúa en la llegada de la nueva interventora y de la secretaria municipal, que por cambios en los criterios aplicados con anterioridad, han provocado que se hayan ido sucediendo los problemas en pagos. Tanto es así, que la empresa de aguas solicitó al Consistorio que asumiese el servicio tras meses con facturas sin cobrar, algo que el Gobierno de Óscar García Patiño garantizó a través del inicio de una revisión de oficio.
Por su parte, el gobierno local se adhirió en octubre de 2023 a la Central de Contratación del Estado con el objetivo de desbloquear parte de la situación , que buscaba el ahorro económico, la reducción de la carga de trabajo por parte del personal técnico y la agilización de los plazos de tramitación de expedientes. Unas metas que no se han alcanzado y que han derivado en la dimisión del edil este jueves.
"Solo Cambre se encuentra en esta situación de bloqueo"
García Patiño ha argumentado en una rueda de prensa convocada hoy a las 12:00 horas, que "lo más fácil sería ponerse de perfil y seguir cobrando 40.000 euros al año los tres años que quedan de legislatura (lo que supone un total de 120.000 euros), una cantidad importante de dinero, pero siempre di la cara y no soy así ni seré así, antes que político soy vecino", reivindicó.
"Me metí en política y fundé un partido para que en Cambre se hagan las cosas, crecer económicamente, culturalmente, que fuera un Concello referente en la comarca, para trabajar y gestionar, pero no me dejan" sentenció, a lo que añadió que "la actual legislatura es complicada, con falta de personal en todos los departamentos". Sobre ello, aclaró que se propuso a la secretaria del Concello traer a tres personas para reforzar "y no obtuvimos el beneplácito para hacerlo", concretó.
A continuación afirmó que "ojalá no me equivoque y en nueve meses venga un funcionario A1 que solucione, que haga pliegos para contratación o resuelva contratos que hasta ahora muchos de los funcionarios de esta casa no fueron capaces por lo difícil que resultaba esa tramitación".
Con respecto a la interventora municipal, una de las protagonistas del conflicto en el Concello de Cambre, García Patiño comentó que lo primero que hizo "fue un reparo suspensivo de la nómina del mes de junio según entró, por considerar excesivas las gratificaciones que se tenían que pagar, sin ningún estudio previo y sin preguntar por la situación en la que nos encontramos, sin analizar si son o no necesarias para el buen funcionamiento del Concello".
Por este motivo, el alcalde ha asegurado que "a este gobierno no se le ha permitido una disposición transitoria, como recogen las leyes cuando se modifican". "Les advertí de las consecuencias de sus interpretaciones, que hoy vemos y que en adelante seguiremos viendo, pero no sirvió para nada. Cambre no funciona diferente a otros concellos de nuestra comarca, no es que los demás no tengan servicios en precario o carezcan de personal, todos tenemos similares problemáticas, pero solo Cambre se encuentra en esta situación de bloqueo", sentenció.
Sobre la interventora del Concello, criticó sus "reparos al pago de cualquier tipo de contrato aún estando en vigor". "Cero proactividad, cero empatía y cero defensa del interés general de Cambre", dijo García Patiño, a la vez que reconoció que para él esta situación "es muy vergonzosa" y manifestó su importencia después de "peregrinar por diferentes administraciones" de las que recibió comprensión "pero de ninguna un informe que desbloquease la situación".
Sin embargo, aseguró que una excepción fue la del Consello Consultivo, a través de una doctrina conocida la semana pasada que dio pie a aprobar en el último pleno previa fiscalización de la interventora, parte del pago a la empresa de aguas, "para asegurar a los vecinos un servicio esencial como el abastecimiento y saneamiento de agua", según Patiño.
Sobre las gestiones con estas empresas, y en alusión a estas dos trabajadoras, el alcalde se preguntó: ¿Cómo podemos pedirle a una empresa desde una administración que siga prestando un servicio y no pagarle?", a lo que él mismo respondió alegando que se trataría de "esclavitud".
"Muchas empresas están denunciando al Concello y muchas más anuncian el cese de servicio"
Óscar García Patiño reconoció que "son muchas las empresas que están denunciando al Concello y muchas más las que anuncian el cese de servicio o suministro por no poder asumir los gastos. Empresas que están pidiendo créditos y trabajadores que cobran tarde, mal y a rastras". "Lo último es que ya no nos sirven gasolina para los vehículos y lo que vendrá, pero soluciones ninguna", subrayó.
Sobre los problemas de pagos, el alcalde reivindicó que propusieron desde el gobierno local "que se buscase la posibilidad de pagar la mitad de la deuda", sobre lo que argumentó que "una vez más nos encontramos con una negativa y ninguna solución".
Sobre la situación de bloqueo, García Patiño opinño que existe "una pública animadversión hacia mí". En este contexto, puso en valor que "Cambre es un concello con potencial, atractivo para vivir, con un peso importante en el área metropolitana" y aclaró que no comprende como habiendo 23 millones de euros en las arcas municipales y una deuda a proveedores de cinco millones, "no se pueda pagar".
"Cambre no está en bancarrota ni tiene problemas de solvencia. En 2015 la deuda de Cambre era de 2,8 millones de euros y hoy no debemos nada a los bancos", explicó el edil, a la vez que aseguró que "dos habilitadas nacionales paralizan pagos a empresas y a los trabajadores". Sobre el periodo medio de pago a empresas, García Patiño ejemplificó que en 2022 el promedio era de 8,2 días y el cuatro trimestre de 2023 se elevó a más de 284 días, a causa de la situación de bloqueo actual.
Por último y visiblemente emocionado hablando de sus allegados y compañeros en el Concello, el alcalde dejó claro que "hay un número de bajas elevad entre los trabajadores de Cambre y la huida de funcionariado a otros ayuntamiento con una situación más estable y cómoda para trabajar". También tuvo palabras para la oposición, a quienes acusó de "no tender la mano frente a los problemas e intentar sacar rédito político", lo que concluyó que supone "un daño irreparable a una institución".