El pequeño y rural municipio de Boimorto, situado en el corazón de la provincia de A Coruña, esconde un triángulo de las Bermudas electoral. En una sección censal de este pueblo ha salido un inaudito resulado en las elecciones europeas, con Vox como primera fuerza. El partido de extrema derecha de Abascal nunca ha superado el 10% en una sección censal gallega, pero en la 02-001 de Boimorto consigue un abrumador 33,1%.
La cosa se pone surrealista al comprobar que, tras el 23,1% del PP como segunda fuerza, un partido minoritario como Frente Obrero se sitúa tercera con el 13,8%, y los independentistas catalanes de Junts son cuartos con el 10,5%. Boimorto no está lejos de Casa Assumpta, en Arzúa, el mejor sitio de calçots de toda la provincia, pero aun así el resultado de Puidgemont parece exagerado. El PSOE solo logra ser quinta fuerza, y Ahora Repúblicas (la coalición del BNG) es sexta.
Un error informático, la única explicación
Los datos de esta sección censal alteran completamente el resultado de Boimorto, de solo 2.000 habitantes. El global municipal confirma al PP como primera fuerza del ayuntamiento, con un 36,95% y 279 votos, y a Vox como segunda, con un 19,47% y un total de 147 votos (132 de ellos procediendo de esta llamativa sección). Lo mismo sucede con Frente Obrero (57 votos, 55 de la sección) y con Junts (sus 42 votos son en esta sección). En el cómputo municipal, PSOE y Ahora Repúblicas logran remontar y ser tercera y cuarta fuerza respectivamente.
La única explicación para tales resultados es un error informático: o bien se han traspasado mal los datos y se han confundido los partidos, o bien se ha confundido la sección con otra de otro territorio. Lo más probable es que en unas horas o días ese extraño oasis verde de la ultraderecha desaparezca, y se corrijan los datos con unos nuevos resultados que a buen seguro traerán malas noticias para Abascal, Puigdemont, y el líder del Frente Obrero.